La economía colombiana ha estado en graves problemas durante el último año. El crecimiento no ha sido el esperado para varios sectores y el comercio ha sido uno de ellos, pues ha visto una dura reducción en las ventas, que ha generado también una caída en los ingresos de los hogares que dependen de esta actividad económica.
Un reciente estudio de la Federación Nacional de Comerciantes reveló que el panorama sigue siendo complicado para los comerciantes del país y que el escenario a futuro es poco alentador.
De acuerdo con el informe, los recortes de las tasas de interés por parte del Banco de la República que recientemente quedaron en un 10,25%, no han logrado impactar aún el promedio de las ventas generadas por el comercio. De hecho, la encuesta analizó las respuestas de cientos de empresarios consultados. Para el 46% las ventas fueron similares y para otro 28% disminuyeron si se comparan con el mismo mes del año anterior.
Ante ese escenario, el presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal, aseguró que aunque se ha registrado una mejor dinámica en la venta de los bienes durables y semidurables, como lo son vehículos, motos, muebles, electrodomésticos y computadores, lo cierto es que los hogares siguen siendo muy cautelosos con sus gastos, sobre todo en las categorías asociadas a la moda, como lo son textiles, vestuario, calzado, bisutería, morrales y similares.
Cabal también apuntó a que, pese a la medición positiva que dio el Dane para las ventas de comercio detallista, lo cierto es que en lo corrido del año se mantiene el saldo en rojo, con una caída del 1% y en el acumulado a doce meses la baja es de 2,2%.
“El informe mensual de FENALCO destaca el reporte negativo de los comerciantes de agroinsumos y almacenes de provisión agrícola, los cuales expresaron su desazón por el mal comportamiento en sus ventas durante el tercer trimestre, incluyendo el mes de septiembre”, indica Fenalco.
Respecto al flujo de visitantes en centros comerciales, el gremio indicó que la cifra cayó notoriamente, sobre todo en la primera semana de septiembre cuando se vivió en el país un paro camionero que se extendió por 6 días.
“Al mal comportamiento del sector en lo corrido del año 2024 y la incertidumbre por el difícil momento político que atraviesa el país; se suma la reforma laboral que adelanta su discusión en la Cámara de Representantes y que sin duda será la estocada final para muchas micro, pequeñas y medianas empresas, que han aguantado este difícil momento en sus negocios pero que seguramente no sobrevivirán a los altos costos de contratación que se avecinan”, agregó.
Finalmente, el estudio también revela las expectativas que tienen los diferentes empresarios y comerciantes de cara al futuro del país. El informe aseguró que un 31% de los empresarios se declara optimista. Por otro lado, un 69% dice que las cosas se mantendrán como hasta ahora o que les irá peor. Dichas respuestas demuestran la percepción de los encuestados, que cada vez es de mayor incertidumbre y desconfianza.
“Aunque los comerciantes consideran que la reducción de las tasas de interés y la desaceleración de la inflación en este año, posibilitan mejorar la capacidad adquisitiva de los hogares y en consecuencia una mejor perspectiva para la temporada de fin de año”, indicó la Federación.
“Los comerciantes perciben una temporada de fin de año más movida que la del 2022 y 2023, años que registraron balances tristemente negativos. Hay buen aprovisionamiento de mercancías importadas y aún no se advierten graves problemas en la cadena de suministro por los problemas en Oriente Medio, o por el paro portuario de los Estados Unidos o la guerra en Ucrania”, concluye el informe.
Además, aseguraron que los comerciantes perciben una temporada de fin de año más movida que la del 2022 y 2023, años que registraron balances tristemente negativos. También hay buen aprovisionamiento de mercancías importadas y aún no se advierten graves problemas en la cadena de suministro por los problemas en Oriente Medio, o por el paro portuario de los Estados Unidos o la guerra en Ucrania.