La agencia calificadora de riesgo Fitch Ratings publicó un documento este miércoles en el cual sostiene que la llamada Ley del SOAT, que fue aprobada por el Congreso de la República, tiene repercusiones negativas en la industria aseguradora del país.

“La Ley del SOAT, recientemente aprobada por el Congreso, podría presionar la rentabilidad de las compañías de seguros que comercializan el SOAT en 2022. El impacto variará dependiendo del peso de este segmento de negocio en los ingresos totales de la aseguradora, así como de la estrategia comercial y la mezcla del parque automotor que administre”, dijo la calificadora.

Y es que esta ley genera un descuento de 10 % en el pago del SOAT (seguro obligatorio de accidentes de tránsito) a los conductores que no se vean involucrados en accidentes, o hayan tenido multas o sanciones durante un tiempo determinado.

Con esta iniciativa, el objetivo del Congreso es reducir la evasión en la compra del SOAT en, por lo menos, 47 %.

“Si bien el descuento al usuario final es inferior, la aseguradora tendrá un impacto de 10 % en las primas de las pólizas de SOAT que hayan presentado un buen comportamiento siniestral, lo que derivará en una disminución de las primas en este segmento de negocio para 2022″, dijo Fitch.

Hay que decir que el descuento de 10 % de la póliza se realizará sobre el porcentaje que recibe la aseguradora y no sobre el valor total que se paga por el SOAT. En este sentido, el mayor valor que asumirá el asegurado por el aumento a la contribución a la ADRES, junto con el descuento que se espera realizar sobre una base cercana a 55 % del valor a pagar por la póliza, permite inferir que el descuento final en el pago será cercano o inferior a 5 %, toda vez que, además, habría que considerar el incremento anual del salario mínimo de 2022.

Dentro del marco de esta nueva ley, también se estableció un límite a la comisión de intermediación para la comercialización del SOAT de 5 % sobre las primas mensuales emitidas, con lo cual se espera que las aseguradoras logren compensar parcialmente el descuento otorgado en la prima del seguro.

La Ley del SOAT también aprobó un aumento de 2 % a la contribución al Sistema de Seguridad Social en Salud (ADRES), que estaría a cargo del tomador de la póliza del SOAT.

“Cabe destacar que actualmente el valor que se paga por dicha póliza incluye componentes relacionados con contribuciones que son transferidos a la ADRES, a la Agencia de Nacional de Seguridad Vial y al Registro Único Nacional de Tránsito. Según información de la Federación de Aseguradores Colombianos, en promedio de cada $ 100 que paga el tomador del SOAT, se descuentan $ 45 para transferencias y contribuciones, y los restantes $ 55 son para que la aseguradora atienda siniestros y pague gastos asociados a la operación del ramo”, dijo la calificadora.

Otro aspecto incluido en la ley está relacionado con la obligatoriedad de las aseguradoras de ofrecer un producto complementario de responsabilidad civil a la póliza del SOAT.

“Esto significará una oportunidad de crecimiento y una profundización mayor del sector asegurador en Colombia, el cual alcanzó una penetración de 3,1 % a diciembre de 2020, inferior a otros países más desarrollados, como Estados Unidos, Francia e Italia, cuya penetración oscila entre 8 % y 12 %”, dijo Fitch.

Para implementar el descuento sobre el valor recibido por la aseguradora en el valor de la póliza, se requerirá compartir información siniestral entre todas las aseguradoras, por lo que habrá que conciliar si el usuario contrató su póliza con aseguradoras diferentes en los últimos dos años. Para ello, habrá que contar con el registro histórico del comportamiento siniestral del usuario y si mantuvo la vigencia de la póliza en ese mismo período.

“En este sentido, el gremio asegurador espera desarrollar tecnología en un período prudencial y así garantizar el adecuado descuento a los usuarios con buen comportamiento siniestral”, resaltó la agencia.

Fitch estima que las compañías que operan SOAT podrían tener un impacto en su rentabilidad que variaría entre moderado y alto. Lo anterior dependerá del peso de esta línea de negocio, la mezcla del parque automotor asegurado y los niveles de retención que maneje la compañía, así como de sus estrategias para mantener un crecimiento rentable con un esquema de distribución innovador y eficiente.

“No obstante, el escenario incierto en el desempeño de la economía del país, junto con los riesgos propios a los que está expuesta esta línea de negocio, son factores que motivarían a una actualización en el análisis de dicho impacto”, concluyó.