Cada vez se confirma más: los colombianos tendrán precios altos por más tiempo del que se esperaba antes de que la inflación tomara velocidad y avanzara en su escalada alcista, que la llevó en noviembre a registrar un 12,53 %, mucho más de lo que pronosticaba el mercado.
Nada parece desviar ese camino ascendente de los precios para el cierre del año, por lo que ahora, los analistas están más seguros de que la cifra, no solo estará en dos dígitos, sino que sobrepasará el 12 %, con una posible consecuencia: el Banco de la República podría incrementar las tasas de interés con un número similar al que ha aplicado en las últimas decisiones (100 puntos básicos), en vez de los 50 o 75 puntos que esperaba que pusiera en el último mes del año.
Lo cierto es que el dato revelado este lunes por el Dane, que sería el más alto en todo el siglo, pues no se veía desde 1999, puso ya a los expertos de mercado a hacer sus cuentas.
Los economistas del BBVA, por ejemplo, recuerdan que la expectativa que tenía el mercado era que la inflación llegara a 12,27% y, en sus cuentas, en particular, tenían anotado un 12,42 %.
En el hecho de que la canasta de alimentos hubiera sido el motor en el crecimiento de la inflación, está en parte la explicación del impulso al indicador. “La canasta volvió a sorprender al mercado, con una inflación mensual del 1,5 %, con lo que alcanzó una variación anual de 27,1%, acelerándose 5 puntos básicos respecto al dato del mes anterior”, analizaron los investigadores económicos del BBVA.
¿La gente salió a comprar alimentos procesados?
En las estadísticas presentadas por el Dane se evidencia que la gente pudo salir con mayor apetito, a comprar alimentos procesados, los cuales, están más caros porque son importados, pero, además, son parte de los que quedarán con un precio mayor una vez entre a regir la reforma tributaria que creó el impuesto saludable.
“Como esperábamos, la inflación de las subacanastas de productos perecederos y carnes empezó a desacelerarse en la comparación anual, en tanto que los procesados mostraron una aceleración de 103 puntos básicos”, analizaron los expertos del BBVA.
¿Y ahora qué?
Dentro de la recisión de datos que hicieron los analistas del Banco está la cifra en la cual se ubicó la inflación básica (sin alimentos ni energéticos), la cual alcanzó una cifra anual de 9,48 %. “Los bienes registraron la mayor aceleración, con presiones que continúan asociadas a vehículos y productos de aseo e higiene corporal”. Esto podría llevar a que esas dos subramas de la industria tuvieran frenos visibles en los próximos datos de producción que entrega la entidad de las estadísticas.
Y otro componente que llama la atención de los economistas del BBVA es el de los servicios, toda vez que se viene la temporada de vacaciones de fin de año, justamente, donde los colombianos tienen una alta demanda de ellos (los servicios). “Las mayores contribuciones las aportaron comidas en establecimientos de servicio a la mesa y fuera del hogar, además de arriendos y paquetes turísticos”, dijeron los analistas.
Con esas estadísticas, el BBVA lanza su pronóstico, según el cual, “esperamos que la inflación termine el año cercana al 12,5 %, aún con continuidad de presiones en la inflación de alimentos este año”.
Para los expertos, la inflación total solo empezará a ceder -y lentamente- en el primer semestre de 2023, pero lo hará con más fuerza en la segunda mitad de ese año, por lo que el consenso general es que en el otro año ya el indicador retroceda y de nuevo tenga solo 1 dígito.