En Colombia, para la ejecución de los grandes proyectos de infraestructura, los concesionarios obtienen recursos de deuda tanto en el sistema financiero local como en el mercado financiero internacional.
En ese sentido, dichas firmas proyectan su modelo financiero con un margen de maniobra y hasta un límite en la subida del precio del dólar, pues son ellos quienes asumen el riesgo cambiario, al menos parcialmente.
Al respecto, María Lucía Amador, directora de Mendoza, explicó que “dada la diferencia que resulta de la devaluación del peso en este momento, algunos proyectos no deben estar generando los ingresos necesarios para el pago de los compromisos asumidos y la rentabilidad esperada”.
Explicó que lo anterior se da “por cuanto la mayoría de las deudas se asumen en dólares y, en el caso de los inversionistas extranjeros, estos plantean su rentabilidad en dólares, pero la generación de ingresos del proyecto está ligada al peso”.
Se afecta el costo
La experta dio el ejemplo de que, según información pública, “para la primera línea del Metro de Bogotá, por ejemplo, el día de la suscripción del contrato el dólar estaba a 3.500 pesos y en la estructuración se proyectó un margen de maniobra de un dólar máximo de 4.200 pesos, pero hace unas semanas este superó los 5.000 pesos, manteniéndose desde entonces por encima de los 4.800 pesos”.
De igual forma, la devaluación, además, afecta el costo del crédito porque trae consigo un aumento en los intereses y en el valor de la deuda para los concesionarios, lo que disminuye la utilidad y el flujo de caja disponible.
Igualmente, según la experta de Mendoza, “con las elevadas tasas de interés, que es un fenómeno que está presentándose a nivel mundial, es más difícil conseguir créditos a largo plazo, por lo que los proyectos pueden verse en aprietos para lograr su cierre financiero partiendo de su modelo financiero inicial. Así, se debe empezar a pensar en estructuración de financiaciones a corto plazo para no depender tanto de esta volatilidad que estamos enfrentando”.
Agregó Amador que muchos de los componentes que se necesitan para construir algunos proyectos ferroviarios como el Regiotram y el Metro (trenes, subestaciones, sistemas de comunicación) son importados, entonces son insumos que por la inflación han incrementado su valor en forma considerable.
En ese sentido, se puede afectar el ritmo de proyectos que exigen importaciones de materiales o equipos.
De acuerdo con la ejecutiva, ya se comienza a ver este impacto en proyectos que se encuentran en ejecución y los constructores han manifestado su preocupación en este sentido.
Según Amador “recientemente Conconcreto renunció a su participación en el consorcio constructor del proyecto Tercer Carril Bogotá- Girardot, argumentando que el incremento de la inflación, las tasas de interés y la devaluación del peso frente al dólar impactaron al alza los precios de materiales y servicios de construcción, haciendo inviable su participación en la construcción de este proyecto”.
A diseñar esquemas
Agregó que la financiación de proyectos de infraestructura con divisas extranjeras trae consigo la necesidad de diseñar esquemas para blindarse del riesgo cambiario, puesto que los ingresos de los proyectos (en un gran porcentaje) son en moneda local.
Además, la especialista aseveró que “según la Ley 1508, el CONFIS puede autorizar la asunción de compromisos de vigencias futuras que amparen la ejecución de proyectos de Asociaciones Público Privadas (APP) en dólares, como mecanismo para compartir el riesgo cambiario entre la entidad pública y el privado, mejorar el costo de financiamiento de los proyectos, reducir la dependencia de la banca local y fomentar la participación de banca internacional. Esto funcionó como mecanismo de protección frente a la devaluación en los proyectos del Programa 4G”.
Por otra parte, para proyectos 5G como el Canal del Dique (que requiere inversiones importantes en temas de dragado con maquinaria extranjera) “se ha incluido también un porcentaje del 29% de las vigencias futuras anuales en dólares para facilitar la financiación. Esto es un porcentaje importante que puede ayudar a que el impacto del dólar no sea tan alto en este proyecto”.
Sin embargo, dijo, “si no se replica esto en otros proyectos 5G, si puede haber un efecto importante en la consecución de recursos de deuda y financiación en dólares y, por ende, un impacto importante en los cierres financieros”.