Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda en Colombia, reconfirmó que el precio de la gasolina en Colombia sí seguirá subiendo en el país durante los próximos 3 meses consecutivos. “Vamos a llegar a precio internacional, aún nos faltan tres meses de aumentos para lograrlo. Pero después tendremos que pensar en el ACPM y el diésel; sabemos que será doloroso, pero hay que hacerlo, porque hay que cerrar esa brecha y dejar de entregar ese subsidio”, puntualizó Bonilla.
Y aunque el mismo ministro Bonilla acepto que sería doloroso, porque no se puede negar que este panorama afecta a la mayoría de colombianos, no solo los que tienen vehículos, sino también para las cabezas de hogar que tiene que mercar, la iniciativa sigue en pie.
Los expertos han asegurado que el incremento de la gasolina puede afectar la inflación en Colombia, que durante 4 meses consecutivos desde abril de 2023 ha venido bajando; en teoría, transportar los alimentos saldría más costoso, por lo que han que subirle al precio final y que se vería reflejado en un mayor golpe al bolsillo de los colombianos.
Ante este panorama, el ministro de Hacienda también aseguró que el papel de la junta del Banco de República en detener el crecimiento del costo de vida ha empezado a dar resultados, porque con tasas de interés altas, el consumo se ha frenado y ha logrado que la inflación baje.
“Es un acumulado del año 11,78 %, 0,35 % por debajo de lo que teníamos en el mes pasado y significa que llevamos un cuarto mes con descenso en la tasa de inflación. Es un buen dato para el país”, manifestó el jefe de la cartera.
¿Cuál es la razón de subir el precio de la gasolina?
Desde el segundo semestre de 2022, para contrarrestar dichos efectos, mes a mes, el precio del galón de gasolina comenzó a subir entre 200 pesos y 600 pesos, panorama que por lo menos se mantendrá hasta diciembre de 2023. A julio de este año, el precio del galón de gasolina corriente está en 12.964 pesos en promedio.
La razón es porque analistas, expertos y el Ministerio de Minas y Energía están en reuniones para definir qué sería lo mejor en materia de estos incrementos por el comportamiento económico que atraviesa el país y que también va tomando otro rumbo, por ejemplo: un dólar que bajó considerablemente (Tasa Representativa del mercado de este 1 de agosto de 2023 fue de 3.898 pesos, la más baja que se ha registrado en lo que lleva el 2023).
La relación del precio de la gasolina con el precio del dólar en este momento es positiva; explican los expertos que si la moneda norteamericana se pone barata, los precios de la gasolina también se estabilizan porque se pagan a precio internacional. Por lo pronto, la decisión del incremento para agosto del precio de la gasolina, no está del todo clara, las comunicaciones de la cartera de Minas y Energía indicaron que también están a la espera de la determinación.
Bonilla, en meses pasados, aseguró que “el tope es equilibrar los precios, en los últimos meses o días el precio del petróleo comenzó a bajar, eso tendría que tener un efecto en el precio internacional (...) el proyecto de largo plazo es que los colombianos empiecen a demandar otro tipo de carros, los colombianos siguen comprando carros de combustible fósil, van a sentir un impacto por ejemplo quienes tengan carros que consuman premier, (...) a finales de año el galón de gasolina debería estar en 16.000 pesos”.
Gobierno busca por todos los frentes dinamizar la economía
En medio del congreso de la Andi, el titular de la cartera económica también le envió un directo mensaje al sector privado, en consecuencia a la presentación de las cifras de crecimiento, que en el segundo trimestre del 2023, fue del 0,3 %, según lo expuesto por el Dane, algo que no cayó muy bien entre los inversionistas.
El ministro Bonilla pidió que el sector privado sea el protagonista de la dinamización de la economía, reactivando proyectos y obras de infraestructura, generando así más puestos de trabajo, lo que mitigaría la marcada desaceleración.
Si bien el Gobierno se mantiene muy optimista, considerando que el crecimiento puede llegar a ser del 2 %, en el mejor de los escenarios, y la inflación puede caer por debajo del 9 %, lo que cambiaría el panorama pesimista que tienen los sectores, y a su vez, le ayudaría al Estado a ejecutar sus presupuestos, que no se han desplegado según lo esperado.
“El Estado está comprometido con el gasto público para reactivar la economía en el segundo semestre, pero también tiene que seguir pagando deuda y cerrar el hueco del Fepc, que no está contabilizado como endeudamiento. Esperamos el trabajo mancomunado entre sector púbico y sector privado”, agregó el minHacienda.