Tras haber trascurrido una semana, la invasión de Rusia a Ucrania continúa generando estragos en todos los mercados del mundo y en la sesión de este viernes –4 de marzo–, las bolsas europeas registraron nuevos desplomes.
La Bolsa de Valores de Londres terminó este viernes con una caída del 3,48 %. Su índice de referencia, el FTSE-100 bajó 251,71 puntos. Mientras que la Bolsa de París también sufrió los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania y su índice bursátil, el CAC 40, se desplomó un 4,97 %.
Igualmente, la Bolsa de Milán cerró este viernes a la baja y su índice FTSE MIB disminuyó un 6,24 %, hasta situarse en los 22.464,86 puntos. La Bolsa de Milán acumula una caída de cerca de un 13 % desde el 23 de febrero, un día antes del inicio de la invasión de Rusia a Ucrania.
El Ibex 35, el principal índice bursátil de referencia de la bolsa española, anotó un desplome del 9,02 % en la que ha sido su peor semana desde el estallido de la pandemia del coronavirus, lastrado por la guerra entre Rusia y Ucrania, que se ha recrudecido en los últimos días y ha llevado al selectivo a cerrar en el entorno de los 7.700 puntos.
En la sesión de este viernes la caída fue del 3,63 %, después de que un bombardeo ruso haya provocado un incendio en la central nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa, a orillas del río Dniéper.
La Bolsa de Moscú permaneció cerrada este viernes por quinta sesión consecutiva, en lo que supone el período de clausura más largo del parqué moscovita, superando incluso el registrado durante la crisis económicas de 1998.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, realizó un discurso a través de un video publicado en Facebook en el que pidió el cese de los bombardeos, denunciando que los tanques rusos “están disparando a unidades nucleares” y que estarían “equipados con cámaras termográficas”.
De su lado, el presidente ruso, Vladimir Putin, aseguró que Rusia “no tiene malas intenciones” hacia sus países vecinos, al tiempo que les ha “aconsejado” no “escalar” la situación.
Por su parte, la Otan rechazó este viernes la opción de aplicar una zona de exclusión aérea en Ucrania, como han reclamado en reiteradas ocasiones las autoridades ucranianas, asegurando que la medida podría generar una escalada del conflicto y provocar una “guerra total” en Europa.
Los analistas señalan el temor de los inversores ante las consecuencias económicas de la invasión rusa de Ucrania, como la estanflación, una situación de recesión de la economía con una elevada inflación por el aumento de materias primas como el petróleo, el gas, el trigo o el maíz.
El analista de XTB, Joaquín Robles, señaló que las materias primas continúan subiendo, ejerciendo todavía más presión sobre la inflación. Tras las sanciones a Rusia, un gran número de empresas occidentales han cortado lazos o han suspendido sus operaciones temporalmente, lo que podría generar interrupciones en la distribución de muchas materias primas que podrían seguir elevando los precios, manteniendo una inflación elevada por más tiempo de lo previsto.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó que abordar la inflación es su máxima prioridad, mientras que el presidente de la Fed, Jerome Powell, defendió ante el Congreso su estrategia de subir los tipos y advirtió que podría tener que tomar medidas duras si los precios no bajan.
“A pesar del daño que pueda provocar en el crecimiento, la Fed considera que la economía norteamericana puede soportar unos tipos de interés más altos. Lo que ya no espera el mercado es una subida de 50 puntos básicos para marzo, (pues) las previsiones se han reducido a 25 puntos para marzo y cinco subidas en el conjunto del año”, señaló el analista.
Según XTB, el sector financiero se está viendo especialmente perjudicado, ya que la decisión de aislar a determinados bancos rusos tiene una serie de consecuencias que “todavía son difíciles de cuantificar”.
“La bolsa rusa se ha desplomado y los reguladores no permiten a los inversores extranjeros cerrar sus posiciones. Los tenedores extranjeros de deuda pública rusa también podrían sufrir el impago, mientras que muchos negocios se han visto afectados indirectamente al tener algún tipo de relación comercial con Rusia. Por otro lado, este conflicto podría provocar una desaceleración económica que forzara al Banco Central Europeo a retrasar la subida de los tipos de interés”, apuntó el analista de XTB.
*Con información de Europa Press.