Un nuevo pero muy fuerte apretón en las tasas de interés de referencia aplicó este jueves 30 de junio el Banco de la República, al terminar la reunión de la junta directiva del Emisor.
Las tasas fueron incrementadas en 150 puntos básicos, según informó el gerente del Banco, Leonardo Villar, lo que implica que pasan del 6 % que tenían desde la reunión de abril, a 7,5 % ahora. Se trataría de la mayor alza desde el diciembre de 2016, año de fuerte crisis económica en Colombia, cuando hubo devaluación del peso, caída del petróleo e inflación disparada.
Según dijo el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, por el momento no puede establecer si se continuará en esa senda alcista o no de tasas de interés, pues como corresponde a la autoridad que rige la política monetaria del país, estarán permanentemente monitoreando el crecimiento de la economía y el avance de la inflación, las dos variables que entran a jugar para la toma de las decisiones de los integrantes de la junta.
Por unanimidad
En esta ocasión se destacó que la decisión fue tomada por unanimidad, según dijo Restrepo. Hay que recordar que, hasta el momento, era habitual que existieran diferencias entre los integrantes de la junta, con relación a los porcentajes de incrementos. En esta ocasión, las situaciones que están en el escenario no daban pie a nada distinto que el consenso.
El alza aplicada y anunciada este jueves está en línea con lo que esperaban los analistas de mercado, aunque en esta oportunidad le habían apostado a diferentes cifras, según una encuesta realizada por Anif, en la que había pronósticos en un rango de 100 a 150 puntos básicos en general, pero también contaba con opiniones que estimaron cifras mayores o menores.
Según los argumentos, la decisión de la junta obedece a que la inflación sorprendió al alza y se ubicó en 9,07 % en mayo, mes en el que tuvo un descanso, teniendo en cuenta que en abril había incrementado en 9,23 %.
El dato de junio se conocerá el 5 de julio, luego de que el Dane presente los resultados, pero las señales indican que los precios de bienes y servicios continúan en su tendencia ascendente y ya no son solo impulsados por el alto costo de los alimentos, sino por otras variables. “La inflación básica sin alimentos ni regulados pasó de 5,26 % en abril a 5,87 % en mayo. Las expectativas de inflación siguieron aumentando y se ubican significativamente por encima de la meta de 3 % en el horizonte de política monetaria”, dice el comunicado del Emisor.
Revisan al alza el crecimiento económico
Una de las noticias que dio el equipo que rige la política monetaria en Colombia es la revisión al alza que hicieron del pronóstico de crecimiento económico, luego de haber visto que la cifra del primer trimestre de este año sorprendió, al ser de 8,2 % mientras ellos esperaban un 7,2 %. Por esa razón, y con base en el resultado de la economía en abril, cuando creció en 11,8 %, según el Índice de Seguimiento de la Economía (ISE) del Dane, mientras la expectativa era de solo 8,6 %, fue que pasaron su proyección de 5,0 % a 6,3 % para todo el año.
Los expertos aseguraron que el fortalecimiento de la demanda interna, impulsada por el consumo de los hogares, es una de las razones por las cuales atacan la inflación a partir del incremento en las tasas, de manera que se pueda llevar de nuevo a la meta que había tenido el Banco hasta antes de la pandemia: entre 2 y 4 %.
Destacaron que la cartera de consumo registrada a mediados de junio tuvo un crecimiento anual de 22,1 %, lo que constituye una señal de que había que aplicar el apretón para contener el impacto inflacionario. Recordemos que las tasas se suben justamente para desestimular la toma de créditos, lo que hace que los ciudadanos consuman más (con préstamos) y al haber exceso de demanda en la economía, sin que se logre producir para abastecer las necesidades de consumo, se genera escasez, lo que lleva al aumento de precios.
Los voceros de la junta directiva del Banco, Villar y Restrepo, enfatizaron en que “la decisión adoptada es compatible con la fortaleza que viene mostrando la actividad económica en los últimos trimestres, y contribuirá a que la política monetaria se posicione más rápidamente en una senda que reduzca la inflación, y que converja a la meta en el mediano plazo. En adelante, el ritmo de ajuste de la política monetaria dependerá de la nueva información disponible”.
¿Cuándo volverán a subir las tasas?
Los líderes de la política monetaria colombiana no se arriesgaron a establecer si durante la próxima reunión, que será al finalizar el mes de julio, incrementarán de nuevo las tasas de interés. Todo dependerá de la manera como evolucionen las circunstancias que intentan balancear con la aplicación de las medidas que buscan reducir la toma de créditos por parte de los hogares. Lo que sí expresó el gerente del Banco es que, teniendo en cuenta que la expectativa del mercado es que Colombia se tarde al menos dos años en llevar de nuevo la tasa de interés a 3,8 %, la junta busca acelerar el paso para que esa cifra se logre más rápidamente.