El pasado miércoles 30 de noviembre, en el límite del plazo que le había dado la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) para que las dos primeras turbinas del proyecto hidroeléctrico de Ituango (Hidroituango) entraran en operación, el sistema nacional recibió energía generada por esta central y demostró que está en capacidad de operar comercialmente.

XM, operador del Sistema Interconectado Nacional y administrador del Mercado de Energía Mayorista, confirmó este hecho al informar que recibió comunicación por parte de EPM en la cual declara, una vez surtidos los requisitos establecidos, “la entrada en operación comercial de las unidades 1 y 2 del proyecto Hidroeléctrico Ituango de 290 MW a partir de las 00:00 horas del 1.º de diciembre de 2022”.

Así, EPM superó uno de los principales desafíos en el desarrollo de Hidroituango. De no haber cumplido con éxito esas pruebas, le habrían ejecutado las garantías de las obligaciones de energía en firme, del cargo por confiabilidad de la subasta del año 2012, que ascendían a cerca de 200 millones de dólares. Adicionalmente, hubiera perdido los recursos de esa energía en firme para los próximos años, cuyo valor superaba los 1.000 millones de dólares.

”Hoy (miércoles 30 de noviembre) y mañana (primero de diciembre) las unidades han estado prendidas en la modalidad de pruebas, pero el proyecto ya tiene la capacidad de generar energía”, dijo Jorge Carrillo, gerente de EPM, al hacer el anuncio.

La amenaza de no alcanzar a cumplir con la puesta en marcha de las unidades en la fecha establecida causó tensiones. El alcalde de Medellín, Daniel Quintero, quien también es presidente de la Junta Directiva de EPM, le solicitó al Gobierno ampliaciones en los plazos para la entrada en operación de las dos primeras unidades. Advirtió sobre un racionamiento de energía para 2023 si no se ponía en ejecución el proyecto de Hidroituango.

La ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, salió a desmentirlo y aclaró que “es importante no generar esa sensación de inseguridad frente al abastecimiento de energía eléctrica”. También terció la Fiscalía General de la Nación. A principios de la semana, el fiscal Francisco Barbosa aseguró que, si no prendían las turbinas el 30 de noviembre, intervendrían de manera inmediata para establecer la comisión de hechos con una carga presuntamente penal.

Actualmente, Hidroituango tiene un avance en sus obras del 90 %. | Foto: SEMANA

En pocos días, EPM sincronizó las dos unidades y puso la energía del proyecto a disposición del sistema. Pero esta fue apenas la primera prueba de fuego que superó Hidroituango en su camino a convertirse en la primera generadora de energía del país. Ahora viene la prueba ácida: probar los equipos con capacidad plena, y que las aguas del río Cauca ya no pasen por el vertedero de la presa, sino por los túneles de carga que alimentan las turbinas generadoras. Por eso, a pesar del anuncio de poner energía en el sistema, la central hidroeléctrica solo producirá energía de manera constante y permanente cuando se realicen las evacuaciones aguas abajo ordenadas por la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), decisión respaldada por el presidente Gustavo Petro.

“Antes de prender cualquier turbina en Hidroituango debe evacuarse la población en riesgo como medida de precaución, que es un principio universal. En el Gobierno del cambio por la vida, es primero la vida”, sostuvo el jefe de Estado en su cuenta de Twitter. Precisamente, Javier Pava, director de la UNGRD, ha señalado públicamente que Hidroituango nunca será un proyecto estable. “En mi concepto de especialista, ese proyecto nunca va a ser estable porque hay unas alteraciones muy graves al macizo rocoso, que es lo que más nos preocupa en el mismo informe que se presentó. Realmente, no sabemos cómo va a ser el comportamiento de todas las excavaciones, ni conocemos todas las circunstancias en las cuales ese macizo se encuentra hoy frente a las vibraciones u ondas que van a generar”, ha señalado Pava.

El objetivo es que, con base en el principio de precaución de la Ley 1523 de 2012, se exijan medidas para proteger a la población de las comunidades que habitan aguas abajo del proyecto. Se calculan unas 38.000 personas de los municipios de Valdivia, Tarazá, Briceño e Ituango.

Radican recurso

Sin embargo, apenas un día después de haber conectado la energía de Hidroituango al sistema, se conoció que EPM había radicado un recurso de reposición ante la resolución de la UNGRD que ordena la evacuación.

“El recurso tiene como finalidad aclarar el artículo 4 de la Resolución 1056 del 4 de noviembre de 2022, de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), teniendo presente las dificultades que se han presentado con los alcaldes de los territorios en su potestad de ordenar una evacuación preventiva. Se pretende, además, que la UNGRD permita que, en coordinación con los alcaldes, EPM, las comunidades y organizaciones comunales adopten las decisiones que crean convenientes en el marco de la evacuación preventiva”, le explicó EPM a SEMANA.

De acuerdo con el recurso, EPM pide modificar la resolución indicando que son los alcaldes de los municipios y la empresa quienes determinarán las acciones necesarias que deben implementarse para la prevención del riesgo. “Concretamente, para que definan en coordinación con las organizaciones comunales y sus comunidades si hay necesidad de realizar una evacuación previa a la entrada en operación o si, por el contrario, hay que desarrollar acciones distintas para la incorporación territorial del componente de gestión del riesgo y ejecutar acciones complementarias para fortalecer la preparación de la respuesta en sus áreas de impacto”, señala la petición.

Aún se están realizando encuentros con las comunidades y los consejos municipales de gestión del riesgo de desastres. “Por ende, no se tiene un estimado de cuándo se haría esta evacuación preventiva”, agregó EPM. Por esta razón, una operación de generación constante y permanente de energía que permita su comercialización en el mercado solo se podrá ejecutar cuando se dé la evacuación.

Ante el recurso de EPM, la UNGRD insistió en que se deben hacer las evacuaciones. “Nosotros estamos recomendando como coordinadores del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (SNGRD) que, ante la situación que se pueda generar por el inicio de la operación de Hidroituango y los riesgos que puedan exponer a una población que está ubicada aguas abajo e incluso a pocos kilómetros del proyecto, se tomen las medidas de precaución que establece la ley”, aseguró Pava, de la UNGRD.

Por ahora, como aseveró Alejandro Castañeda, director ejecutivo de Andeg –gremio de generadores térmicos–, “La entrada en operación comercial del proyecto Hidroituango es una excelente noticia para el país, con lo cual se asegura la energía firme que requiere el sistema para los próximos años y aumenta la oferta de energía que requieren los usuarios del sector eléctrico. Esta energía firme nos asegura poder atender la demanda hasta el periodo 2025-2026”.

Otros jugadores del sector, que prefieren mantener su nombre en reserva, coinciden en la importancia del encendido de la central. “Le da holgura al sistema, que está apretado por los retrasos de muchos proyectos, no solo Hidroituango. Teníamos aproximadamente 3.000 megas atrapadas por retrasos, entre ellos las de energías renovables no convencionales, en especial en La Guajira”, dijo uno de ellos.

Además, no solo le da un respiro al sistema, sino que puede mandar una señal de disminución de precios “que puede ser políticamente tranquilizante”, afirmó otra fuente. El alcalde de Medellín calcula una reducción del 5 por ciento en las tarifas tras la entrada de la central.

Una de las mayores preocupaciones estructurales del proyecto está relacionada con el vertedero, que lleva cerca de un año evacuando agua en forma permanente. “Cuando entre en operación comercial, dicen los ingenieros que es mejor que esa agua esté impulsando las turbinas que saliendo por el vertedero”.

Mientras se define el proceso de evacuación de la población aguas abajo para efectuar las pruebas con la carga completa para alimentar las primeras dos unidades de generación, EPM ya avanza en la nueva etapa: el 30 de noviembre también terminó el contrato del consorcio CCC Ituango, y la firma Schrader Camargo se encargará de las obras civiles de las unidades 3 y 4 para entrar en operación el 30 de noviembre próximo.

La polémica historia de Hidroituango se sigue construyendo y cada uno de sus capítulos será una prueba de fuego.