Justificando que el tiempo es limitado, la mesa directiva de la plenaria de la Cámara de Representantes recibió una propuesta respaldada por numerosas firmas, principalmente del petrismo y de sectores que buscan la aprobación de la reforma pensional, que se encuentra en su última fase de debate.
De manera sorprendente, la propuesta fue aprobada con 86 votos a favor. Luego, se sometió a votación el proyecto, obteniendo 88 votos a favor y 20 en contra, lo que permite que avance a sanción presidencial. Así, la reforma pensional ha sido aprobada en el Congreso.
La representante a la Cámara, Katherine Miranda, advirtió que “la Reforma Pensional se va a caer en la Corte Constitucional”, y explicó:
1. ¿Se puede acoger el texto de Senado?
Claro que sí, se ha hecho muchas veces, pero la proposición debió estar acompañada del texto aprobado en Senado, por lo tanto, no hubo el conocimiento completo, suficiente, veraz y preciso de los representantes al momento de votar.
2. No hubo por parte del Gobierno o alguno de los ponentes una explicación de las modificaciones que tendría la ponencia que se radicó en la Plenaria de la Cámara con respecto al texto aprobado en Senado.
3. Por la premura de la terminación del año legislativo, no puede eludirse el elemento deliberativo, ni mucho menos eximir al proyecto del cumplimiento del requisito de publicidad, deliberación y aprobación en las plenarias de ambas cámaras del Congreso.
4. Aquí claramente se vulneran:
- Las reglas de procedimiento que permiten el funcionamiento del diseño institucional del bicameralismo.
- Cercena el poder de modificación de las plenarias.
- El rol de las comisiones de conciliación.
- Elimina con todo ello un sistema de frenos y contrapesos interorgánico esencial para el correcto funcionamiento del Estado social de derecho.
Así reaccionan algunos políticos a la aprobación de la reforma
La senadora Paola Holguín y el partido Centro Democrático calificaron la aprobación de la reforma pensional como un “atropello” debido a la forma en que se llevó a cabo, y anunciaron que presentarán una demanda de inconstitucionalidad. “Lo que corresponde es solicitar a la Corte que anule esta reforma. Es una iniciativa que además tiene temas muy complejos de fondo”, expresó Holguín.
“Nuestra obligación para con los colombianos es utilizar todas las herramientas jurídicas ante la Corte para evitar que esta mala reforma, que perjudica al país, entre en vigencia”, añadió.
La congresista Jennifer Pedraza, del partido Dignidad, advirtió que el proyecto tiene grandes posibilidades de ser declarado inconstitucional por la Corte, y pidió al Gobierno que, cuando esto suceda, no digan que fue un “golpe blando”, una frase que Petro ha repetido en varias ocasiones.
“Les advertimos antes de votar y aun así decidieron seguir adelante. Petro, como congresista, sería el primero en oponerse a este ataque a la democracia. Quedaban cinco días y tenían mayorías. ¡Autoritarios!”, escribió en su cuenta de X.
Miguel Uribe, senador del Centro Democrático, afirmó: “Lo que ha sucedido en la plenaria de la Cámara es una vergüenza para la democracia: aprueban a pupitrazo y sin debate el robo del ahorro de los colombianos”.
Juan Manuel Galán también reaccionó, advirtiendo que el proyecto del Gobierno quedó sepultado constitucionalmente por dos razones: no debatir el texto en su totalidad y no someterlo a la suficiente ilustración en la plenaria. “Hay amplia jurisprudencia en la materia”, señaló.
Por su parte, Juan Carlos Losada, representante a la Cámara por Bogotá, expresó que hoy es uno de los días más tristes en el Congreso. Desde su perspectiva, el Gobierno pasó por encima de la democracia, del bicameralismo y de la deliberación.
“Es lo más irresponsable, espantoso y vergonzoso que he visto en el Congreso. Ni siquiera en la época de Iván Duque. Esperábamos algo muy diferente del Gobierno del Cambio, nunca imaginé que atropellarían la democracia. Es muy grave lo que ha sucedido”, concluyó.