Durante un debate de control político en la Comisión Tercera del Senado, el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, se volvió a referir sobre el tema de los precios de los combustibles en Colombia y el manejo del Fondo de Estabilización de Precios (FEPC); y aseguró que se debe actuar con celeridad si no se quiere que el país caiga en deudas billonarias, más grandes que las que tiene actualmente.

Durante su intervención, este funcionario aseguró que si bien la economía del país pasa por un buen momento, hay muchas cosas que ajustar para hacer frente a problemáticas como la inflación, el déficit del 5,6 % del Producto Interno Bruto y el hueco fiscal que se viene abriendo en el país desde hace varios meses por culpa de los combustibles.

Según Ocampo, los precios de la gasolina debieron subir desde hace varios meses para hacer frente a la volatilidad de los precios del petróleo, que llegaron a estar por encima de los 100 dólares por barril. No obstante, agregó, que esta decisión no se tomó para no disparar la inflación y esto agrandó la deuda del país con el FEPC.

El ministro de Hacienda sostuvo que se espera que para 2023, el déficit en el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles suba 28 billones de pesos adicionales “a no ser que empecemos a aumentar con fuerza los precios de los combustibles, que es un tema muy complejo”. Actualmente, la deuda por este concepto ronda los nueve billones, pero se espera que el año cierre sobre los 37 billones de pesos.

En entrevista con SEMANA, este personaje contó que algunos de los precios de los combustibles van a tener que reajustarse en lo que resta del año, más teniendo en cuenta el déficit del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles, tema que también preocupa a Ocampo por su desfinanciamiento.

El número que contó el ministro Ocampo es que el desfinanciamiento de dicho fondo alcanza el 3 % del PIB, lo cual casi equivale a la mitad del déficit de la nación en estos momentos, por eso se hace necesario que los precios de los combustibles sean aumentados.

Sigue el debate por la reforma tributaria

Otro de los puntos que llamó la atención durante la intervención del minHacienda en el Senado fue el manejo que Colombia debe darle al déficit de las finanzas del Estado y a las decisiones que se deben tomar cuanto antes para que la inflación no genere grandes estragos, aunque espera que esta cifra se mantenga en el 8,5 % para fin de año.

Durante este debate, los congresistas aprovecharon la presencia de Ocampo para llamar la atención del Gobierno nacional frente a la reforma tributaria, advirtiendo que esta ley, en caso de ser aprobada, golpeará con fuerza la inversión y espantará las empresas, que buscarán otros países para invertir, afectando también la generación de empleo.

El senador Miguel Uribe, del Centro Democrático, sostuvo que “no es posible que durante los años anteriores se haga un esfuerzo por atraer inversiones, garantizar que lleguen más empresas y se genere trabajo y ahora se les espante con una carga tributaria que incluso toca la canasta familiar y llega a las personas más pobres”.

Frente al tema de los alimentos, el senador Efraín Cepeda, del Partido Conservador, señaló que “en mi tierra, mucha gente vive del pan con gaseosa y del salchichón, razón por la cual no pueden decir ahora que no se toca a los más pobres. Hay muchas cosas para revisar y dejar claro, por ejemplo, de esos 25 billones, cuánto irá a tapar el hueco fiscal”.

Por su parte, el senador Gustavo Bolívar defendió la reforma tributaria y señaló que es algo necesario para financiar el país y recomponer el camino, “acá solo no están pidiendo a los más ricos, a quienes ganamos más, que por favor nos metamos la mano al bolsillo para apoyar a quienes más lo necesitan, a las familias más vulnerables”.

Una de las críticas que más se escuchó durante este debate fue que no se presentara un proyecto de presupuesto para 2023 y simplemente se le pidiera al Congreso que creyera que el otro año se va a necesitar más dinero, situación que los deja ante un panorama de incertidumbre porque no se sabe en qué se usará el dinero.