La inflación anual en Estados Unidos se redujo en junio a su tasa más baja desde 2021, según informó el miércoles el Departamento de Trabajo dando una señal alentadora para los responsables de la política monetaria que luchan contra el aumento de los precios al consumo.
El indicador de precios al consumo IPC, clave para medir la inflación, subió en junio un 3,0 % respecto al mismo mes del año pasado, por debajo del 4,0 % registrado en mayo y ligeramente inferior a lo esperado por los analistas. La Fed emprendió una campaña de subida de tipos de interés en el último año para aliviar la demanda y frenar el aumento de los precios.
Aunque los funcionarios de la Reserva Federal (Fed) han considerado probable que se precisen más alzas de tasas de referencia para que la inflación vuelva a alinearse con su objetivo del 2%, el informe del IPC de junio genera dudas en el mercado sobre el número de subidas adicionales necesarias. El dato de inflación de junio marca la tasa anual más baja en más de dos años.
En otro signo positivo, la tasa mensual de inflación “subyacente” -que excluye los rubros volátiles de alimentos y energía- se situó en 0,2 %; registro más bajo desde 2021.
“Muchos funcionarios de la Fed dejaron en claro que consideran necesarias más subidas”, lo que sugiere otro repunte este mes. Empero una buena lectura del IPC podría cambiar las perspectivas sobre si sigue siendo necesaria una subida en septiembre, según la firma Pantheon Macroeconomics en un informe.
Mientras que el sector vivienda siguió siendo el “mayor contribuyente” al aumento mensual del índice general, otros rubros registraron caídas, como ser las tarifas aéreas y los vehículos usados, según el Departamento de Trabajo en un comunicado.
¿Empezó la desinflación?
“Sabemos que los alquileres se darán vuelta en los próximos meses, por lo que vamos a ver mucha desinflación en lo que queda de año”, afirmó Ryan Sweet, economista jefe para EEUU de Oxford Economics.
“Es una buena noticia para los consumidores”, dijo a la AFP y agregó que espera que la Fed termine su ciclo de endurecimiento en julio.
“El mercado laboral muestra signos de ablandamiento, la inflación está bajando. Seguimos en camino hacia un aterrizaje suave, pero es un camino muy estrecho”, dijo Sweet. La moderación de la inflación subyacente se debió al “desplome de las tarifas aéreas” y la caída de los precios de las habitaciones de hotel, así como del precio de los vehículos usados, dijo Ian Shepherdson, economista jefe de Pantheon Macroeconomics.
Las claves de la inflación destacadas por el presidente de la Fed, Jerome Powell se han “ralentizado al final del segundo trimestre”, dijo Rubeela Farooqi, economista jefe de Estados Unidos en High Frequency Economics.
“Aunque la inflación sigue alta, su desaceleración es una buena noticia para los funcionarios políticos”, añadió en una nota.
Pero no es probable que estos datos cambien el resultado de la reunión de política monetaria de la Fed a finales de este mes, con una subida de tipos de 25 puntos básicos como resultado más probable, dijo Farooqi.
Un aumento en el endeudamiento de las empresas
El endeudamiento de las mayores corporaciones siguió en aumento y alcanzó un nuevo récord, aunque el alza de las tasas debería volverlas más reticentes a contraer nuevos préstamos, indica el informe anual de la administradora de riesgos Janus Henderson, publicado este miércoles.
La deuda de las 933 empresas estudiadas (de todos los sectores excepto el financiero y el inmobiliario) totalizaba el 1 de junio 7,802 billones de dólares, su máximo desde la primera edición de este informe en 2014. Esa cifra representa un alza de 6,2 % a tasa de cambio constante respecto al mismo periodo de 2022.
Las empresas del sector de telecomunicaciones siguen siendo las más endeudadas, empezando por Verizon (primera de la lista, con una deuda de 172.000 millones de dólares), At&T (4ª, con USD 154.000 millones), Deutsche Telekom (5ª, 153.000 millones) y Comcast (6ª, 102.000 millones).
Pero el aumento del último año se explica sobre todo por el sector de los servicios y las colectividades, debido a “importantes gastos de inversiones y de [distribución de] dividendos”. Las petroleras, en cambio, consiguieron reducir su endeudamiento al menor nivel en una década, gracias a sus colosales ganancias.
Hasta ahora, sin embargo, el aumento de las tasas decidido por los bancos centrales para combatir la inflación ha tenido un impacto limitado en las grandes corporaciones, que han conseguido limitar a 5,3 % el incremento de sus intereses de financiación. Eso se debe a que esos mastodontes empresariales toman deuda en el mercado de obligaciones, con intereses fijos, lo que las protege cuando deben refinanciar sus deudas.
*Con información de AFP.