El proyecto de reforma tributaria del presidente Gustavo Petro está cada vez más cerca de convertirse en realidad, luego de que el Senado de la República diera luz verde al articulado de esta iniciativa con la que el Gobierno nacional busca recaudar 20 billones de pesos el próximo año, mediante medidas como impuestos a las bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados, la eliminación de varias exenciones y el fortalecimiento de la lucha contra la corrupción.
En la jornada, que se extendió por 15 horas, hubo de todo. Se presentaron peloteras, ánimos exaltados, euforia en la oratoria, insultos, apoyos, mensajes de protesta, atuendos que pretendieron sentar una posición a favor o en contra. Al final, se llevó a cabo la votación y aprobación en el Senado, del paquete que transforma la manera de pagar impuestos en Colombia; mientras que la Cámara de Representantes suspendió la sesión, con parte de la tarea hecha, para continuar el jueves.
Uno de los puntos más álgidos de lo aprobado en el Senado y que ahora hace fila para su trámite en Cámara de Representantes es el de los denominados impuestos saludables, los cuales, si bien son una prioridad para el presidente Gustavo Petro, actualmente han recibido muchas críticas porque se encontraron con un problema. También son los que en un primer momento afectan a quienes menos tienen.
Esta medida ha sido muy criticada, teniendo en cuenta que la comida más saludable suele ser más cara y que en los hogares pobres la alimentación suele tener un porcentaje mayor del salario que en quienes ganan más. A eso se suma el clamor de la industria nacional que produce este tipo de alimentos, que en algunos municipios es el eje central de la actividad económica de la región.
Una de las arremetidas más recientes contra el Gobierno por este tema llegó por parte del expresidente Álvaro Uribe, quien se mostró bastante preocupado por los efectos que tendrá esta iniciativa sobre los alimentos más básicos de la canasta familiar y aseguró que terminará golpeando a las familias más pobres.
Para este político y líder del Centro Democrático, los impuestos a los alimentos solo aumentarán la informalidad y aumentarán la brecha social entre quienes tienen y quienes no, ya que se mete con el consumo de miles de hogares que hoy en día tienen que hacer muchas piruetas para lograr que la plata alcance, ya que también se enfrentan a un flagelo que sacude a todo el mundo: la inflación.
“Alimentos que quedan gravados con la reforma tributaria. Mayor informalidad, menos empleo, menos consumo. No hubo manera de que se aceptara un período de transición productiva”, dijo Uribe Vélez.
El exmandatario nacional publicó un listado en su cuenta de Twitter en el cual se leen productos como la avena en hojuelas, la cuajada, los bocadillos, los patacones, palitos de queso, mogollas, achiras y tostadas, los cuales quedarán gravados con impuestos a partir del próximo año si se aprueba la reforma tributaria tal y como va en el texto que llegó a Senado y que ahora está en manos de la Cámara de Representantes.
¿Cómo quedó el impuesto para las bebidas azucaradas?
* Si la bebida tiene menos de 6 g de azúcar por cada 100 ml, no le aplicaría impuesto durante los primeros tres años.
* Si la bebida tiene de 6 g a 10 g de azúcar por cada 100 ml, le aplicaría un impuesto de $18 a $28.
* Si la bebida tiene más de 10 g de azúcar por cada 100 ml, le aplicaría un impuesto de $35 a $55.
¿Cómo quedó el impuesto para los alimentos ultraprocesados?
Por su parte, los alimentos ultraprocesados (incluyen embutidos, snacks, cereales, galletas, dulces, chocolates, o lo que coloquialmente se conoce como ‘mecato’), tendrían un impuesto sobre el precio final, de la siguiente manera:
* 2023: impuesto del 10 %.
* 2024: impuesto del 15 %.
* 2025: impuesto del 20 %.
Los que sí pagaran impuestos componen una larga lista de alimentos. Por ejemplo, las carnes frías están incluidas por su alto nivel de sodio: los perniles, el salami, el peperoni, las preparaciones de pavo y de pollo, las albóndigas, las empanadas de carne, las salchichas, el jamón, entre otros.
Uribe no está para nada contento con la tributaria
Horas más tarde de esto, también por su cuenta de Twitter, el expresidente Álvaro Uribe volvió a arremeter contra la reforma y dijo que tendrá efectos negativos a corto, mediano y largo plazo; que terminarán afectando a todos los sectores de la sociedad.
El expresidente de la República aseguró que es necesario que el país empiece a trabajar en recuperar la confianza de los inversionistas y ganar espacio en nuevos mercados, para que de esta forma mejore el perfil de riesgo ante el mundo y se pueda recuperar el buen ritmo que traía el país.