Durante más de cinco días, la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite de Colombia, Fedepalma, junto a Cenipalma, llevaron a cabo la XX Conferencia Internacional de Palma de Aceite, en la ciudad de Cartagena, que contó con más de 2.200 asistentes entre expositores, expertos y palmicultores, quienes intercambiaron conocimientos sobre el presente y el futuro no solo en el país, sino a nivel internacional de uno de los cultivos más prometedores, que busca ser más relevante en el mercado al fortalecer una marca única.

En el marco del evento, el presidente ejecutivo de Fedepalma, Nicolás Pérez Marulanda, aseguró que los palmicultores provenientes de la región, como Perú, Venezuela, México y Brasil, entre otros, se destacaron en su participación.

“Para mí ha sido muy grato el liderazgo indiscutible que tiene Colombia en materia de palmicultura a nivel americano, pero incluso el liderazgo que tiene en la palmicultura mundial”, puntualizó.

“Tenemos profesionales en Cenipalma, profesionales que están en otras empresas de palmicultura de Colombia, que son autoridades mundiales en distintos temas asociados con nuestra cadena productiva, y ver tanta gente que viene de afuera, cerca de 700 personas para aprender de Colombia, es gratificante”, afirmó Pérez Marulanda.

Por su parte, el director general de Cenipalma, Alexandre Patrick Cooman, precisó que hay temas en común con el gremio en Latinoamérica, donde hay grupos de investigación sólidos que “son complementarios”, es decir, la pudrición de cogollo (PC), los híbridos interespecíficos son temáticas de trazabilidad para la zona.

Las mujeres se destacan en esta industria

La caracterización del gremio es fundamental puesto que, con ello, se busca encontrar a quienes hacen parte de este y cómo puede haber un acercamiento para su avance en la industria con nuevas metodologías y buenas prácticas.

“El tema de la identificación cultural en la palmicultura, tenemos más o menos un 23 % de palmicultores que son afrodescendientes; hay una mayoría de campesinos; el 28 % de los predios caracterizados están a cargo de las mujeres y más o menos un 35 % de estos productores generalmente entre pequeña y mediana escala, viven en el predio”, concluyó el director de Extensión de Cenipalma, Jorge Alonso Beltrán.

Por consiguiente, los indígenas tienen un 1 %, porque las zonas palmeras que se destacan en el país son aquellas que están ubicadas en Tibú (Norte de Santander) y Tumaco (Nariño), por ejemplo.

Colombia es el primer productor de palma de aceite en América. | Foto: SEMANA

El cultivo de palma de aceite y el Gobierno nacional

Ante la llegada de un nuevo Gobierno que busca fortalecer la agroindustria, Fedepalma asegura que “la palmicultura puede contribuir en la agenda del Gobierno nacional”, con tres puntos en específico:

  1. Este es el primer cultivo productor de alimentos del país, por lo que se alinea a la propuesta del Gobierno en “el fortalecimiento de la seguridad alimentaria del país”.
  1. La inclusión de palmicultores en la agroindustria.
  1. La transición energética: el sector es pionero al ingresar en la producción de combustibles limpios.

Es de mencionar que el cultivo de palma de aceite es una industria que afirma ser sostenible, colaborando con el uso eficiente de los recursos hídricos; la cero deforestación y la biodiversidad que se denota en los cultivos.

Plantación de palma de aceite | Foto: Getty Images

La producción de aceite de palma

Según lo señaló el presidente ejecutivo de Fedepalma, ”Colombia tiene una en el mercado interno un soporte muy importante: nosotros, el año pasado y lo recorrido de este, hemos vendido cerca del 70 % de la producción en el mercado interno, tanto para el consumo humano como para la producción de biodiésel y también la alimentación animal es un segmento más pequeño”, asegurando que un 30 % de la producción es vendida en el exterior; destacando el papel potencial que cumple Estados Unidos en la importación de aceite de palma.