Durante la presentación de las cifras del fondo administrador de pensiones y cesantías Protección de 2020, Juan David Correa, presidente de la AFP, reconoció que la reforma es urgente, porque debe garantizar un recaudo adicional anual de 1 a 1,5 % del PIB.

No obstante, agregó que “es necesario tener en cuenta que la reforma debe acompañar el desarrollo del país en un momento de coyuntura económica compleja: la reactivación económica y la vacunación son las claves para salir adelante”, dijo.

El empresario pidió a las autoridades que tengan en cuenta a la hora de fijar las nuevas normas tributarias, que es clave que las empresas mantengan sus capacidades de generación de empleo. “Hay que ser sensatos a la hora de poner las cargas. Hay que cuidar la generación de empleo y el ahorro”, comentó en diálogo con SEMANA.

Por eso abogó por incentivos que motiven a los colombianos a ahorrar. Y destacó que es necesario impulsar la inversión en infraestructura, porque eso le pone “una adición al crecimiento de la economía”.

Las cuentas

Correa presentó los resultados del fondo de pensiones Protección, compañía que sintió el año pasado un golpe como todos los actores económicos, pero que a pesar de ello logró dejar rendimientos a sus afiliados y utilidades a sus accionistas.

Por el lado de la rentabilidad de los fondos administrados, Correa señaló que en 2020 todas las administradoras de pensiones agregaron unos 27 billones de pesos en rendimientos a los afiliados. Protección representa cerca de una tercera parte de todo el sistema y la rentabilidad en su fondo moderado estuvo en el 9,9 %. Eso muestra que realmente los ahorros pensionales de los colombianos están en buena forma, dijo.

El presidente de Protección, Juan David Correa, explicó que la pandemia aceleró el proceso de transformación digital de su empresa.

Ya desde el punto de vista de la administradora, las cifras muestran que Protección registró ingresos operacionales de 1 billón de pesos, una caída del 2,2 % frente a los registros de 2019. La utilidad antes de impuestos alcanzó los 388.575 millones de pesos, cayendo 30,1 %, mientras que la utilidad neta del ejercicio fue de $291.394 millones, 34,2 % menor que en 2019.

Todo un desafío

“A pesar de la coyuntura, la primera gran noticia es que en un año tan complejo, con una caída en marzo y en abril del año pasado en el acumulado de ahorro, tuvimos una recuperación extraordinaria”, comentó.

La pandemia significó un desafío de transformación que, según Correa, afrontaron con éxito.

“Logramos mucha eficiencia e hicimos inversiones para ampliar canales de servicios y nuestro call center. Dos semanas antes de que se decretara el confinamiento, enviamos al equipo de Protección para sus casas. Todo es todo. Esta es una empresa de 2.000 empleados y con una mínima excepción de centros de atención, todos nuestros trabajadores están en casa y aún siguen en casa”, explicó.

Destaca que a pesar de ello no pararon la operación en ningún momento y que, por el contrario, ampliaron sus servicios y el portafolio de productos de ahorro e inversión.

“La pandemia significó un proceso de transformación acelerado. Veníamos haciéndolo y logramos en los primeros meses de coyuntura atender a nuestros clientes de manera totalmente digital. Hoy, la capacidad nuestra instalada, para operar digitalmente, es del 98 %, y lo sorprendente es que alcanzamos un 90 % de esa operación digital”, explicó.

Correa dice que la compañía girará hacia un modelo de operación híbrido, porque la presencialidad es clave para temas de cultura e innovación.

Los resultados de Protección muestran que el ahorro pensional de los colombianos logró recuperaciones importantes el año pasado. Esta es una buena noticia, porque el ahorro pensional es uno de los colchones macroeconómicos que tiene Colombia. De otra parte, los resultados positivos para los accionistas muestran que administrar las pensiones y las cesantías de los colombianos sigue siendo un buen negocio.