Los bancos centrales en el ámbito mundial tienen la importante responsabilidad de mantener la estabilidad financiera y económica de sus países. Una de las principales herramientas que utilizan para lograr este objetivo es el ajuste de las tasas de interés.

En este momento, Colombia presenta una de las tasas de interés más altas dentro de las economías de Latinoamérica, con el objetivo de controlar la inflación, que, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), la cifra anual de mayo de 2023 se ubicó en 12,36 %.

El precio del dólar ha caído a los niveles que tenía en agosto del año pasado. La inflación ha cedido, impulsada por los alimentos. Hay expectativa con los combustibles.

El comparativo con el mes de abril muestra que hubo una disminución ligera, frente al 12,92 % que se registró en ese mes anterior. En marzo, entre tanto, los números eran preocupantes, de 13,34 %. Con relación con el acumulado de 12 meses que se tenía en mayo del año anterior, aún falta terreno para que se tengan los indicadores de ese momento, cuando el indicador era de 9,07 %.

Sin embargo, cuando se mira de manera individual el mes de mayo, que en este 2023 tuvo una inflación de 0,43 %, sí se ve la diferencia, pues en mayo de 2022 la inflación ya entraba en esa senda ascendente y se ubicaba en 0,84 %. Para el año corrido, la inflación en Colombia, hasta mayo, fue de 5,83 %, cifra también inferior a la que se evidenció en los cinco primeros meses de 2022: 6,55 %.

Inflación en mayo de 2023: dato mensual, año corrido y el acumulado en 12 meses. | Foto: Transmisión Youtube

Al respecto, el nivel general de precios de los bienes y servicios en una economía aumenta de manera significativa y constante, ocasionado por la subida de las tasas de interés, haciendo que los préstamos sean más caros y, como resultado, las empresas y principalmente las personas, cuenten con menos incentivos para gastar e invertir.

Esto reduce la demanda de bienes y servicios y ayuda a frenar la inflación. Frente a este escenario, Rodrigo Cifuentes, socio de Corporate Finance de BDO en Colombia, comparte seis claves para la salud financiera de las pymes en el contexto histórico de tasa de interés alta que vive Colombia:

1. Análisis de modelo de negocio: es recomendable que las empresas revisen su modelo de negocio y realicen ajustes para mejorar su rentabilidad y especialmente reducir los costos que mitiguen el incremento de financiación. Esto puede resumirse en diversificar productos o servicios, reducir gastos innecesarios y optimizar procesos.

2. Gestión de proveedores: es aconsejable buscar escenarios en los que se logre negociar con los principales proveedores de la empresa buscando obtener mejores precios, y en su defecto, mejores condiciones de pago que permitan optimizar la rentabilidad y el flujo de efectivo.

3. Flujo de efectivo: una gestión adecuada del flujo de efectivo es determinante para cualquier empresa, especialmente durante períodos de altas tasas de interés. Las empresas deben controlar su capital de trabajo, proyectar y monitorear el flujo de ingresos y pagos, teniendo en cuenta las obligaciones de financiación.

4. Reperfilamiento de la deuda financiera: los altos costos de las tasas de interés hacen que las cuotas de las obligaciones financieras se eleven a niveles que dificultan su cumplimiento. Es recomendable buscar formas de mitigar este riesgo buscando condiciones más favorables. Alternativas como mayor plazo, periodos de gracia, capitalizaciones, etc. son algunos métodos.

Las compras compulsivas son un trastorno que afecta la vida personal y social. | Foto: Getty Images

5. Financiamiento alterno: las pymes pueden buscar financiamiento alternativo, y así evitar depender únicamente de los préstamos bancarios. Por ejemplo, pueden explorar opciones de Crowdfunding o de capital de riesgo.

6. Evaluación de inversiones: las empresas deben reevaluar sus inversiones y asegurarse de que estén generando un retorno adecuado. En algunos casos puede ser necesario vender o desinvertir en proyectos o activos que no estén generando un retorno suficiente para evitar un mayor costo financiero.