El Ministerio de Minas y Energía anunció este viernes, 29 de diciembre, que el precio de venta al público de la gasolina para enero de 2024 registrará un incremento.
En el caso del ACPM, su precio de venta al público se mantiene sin modificación.
Así las cosas, los precios de la gasolina presentarán una variación promedio de $ 600 por galón a nivel nacional.
Estas medidas pretenden disminuir el significativo impacto fiscal en el Gobierno nacional por la dinámica de los precios internacionales de los refinados, los cuales han aumentado debido a factores internacionales como el precio del petróleo y el nivel de riesgo global que ha afectado la tasa de cambio en el país.
Para enero de 2024, el precio promedio de venta al público de la gasolina en el país se ajustará en $ 600, ubicándose en $ 15.164 por galón.
Por su parte, el precio promedio de venta al público del ACPM a nivel nacional se mantiene.
Es importante resaltar que, incluyendo este ajuste, Colombia sigue teniendo uno de los precios de la gasolina y del diésel más baratos de América Latina debido a la operación del Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles (FEPC), el cual ha mitigado la presión inflacionaria de los incrementos de los precios del petróleo y sus derivados en los últimos meses.
Hace unas semanas, el presidente Gustavo Petro anunció el último incremento del año en los precios de la gasolina y lanzó una dura advertencia para el bolsillo de los colombianos: a partir del próximo año este fluctuará según el devenir de los precios internacionales.
El jefe de Estado sostuvo: “Hemos logrado cerrar la brecha de precio y acabar el subsidio a la gasolina. Nos espera un último incremento y a partir de allí el precio fluctuará con los vaivenes del precio internacional”.
Subir el valor que los colombianos de a pie pagan por el combustible para sus vehículos particulares o motos era una apuesta que el mandatario había lanzado desde el comienzo del año, pese al impacto de esa determinación en la inflación.
Ante su osada decisión, el presidente Petro dijo: “Agradezco la paciencia y buena voluntad de la capa poblacional que consume esta mercancía, el cierre de la brecha mejorará la estabilidad fiscal del Estado. Sugiero abrir los caminos de la transición de la movilidad hacia medios que no usen combustibles fósiles”.
El Gobierno emprendió un incremento gradual en los precios de la gasolina desde octubre de 2022 para equiparar el precio de ese hidrocarburo con el de los mercados internacionales, pues hasta antes del inicio de su gobierno el monto que pagaban los colombianos se mantenía estable gracias al Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC).
Ese mecanismo le permitía al Estado poner una partida presupuestal para evitar que la gente sintiera la presión en sus bolsillos al adquirir ese bien fundamental para la movilidad de quienes necesita usar su carro o moto particular.
Las cuentas dejan en evidencia la importante subida que han tenido los precios de la gasolina en el país. Antes del gobierno de Gustavo Petro el galón se podía adquirir en un promedio de 9.300 pesos y para este último mes de 2023 su precio se ubica en 14.564 pesos.
De hecho, la apuesta del Ejecutivo era llevar ese monto a un valor cercano a los 16.000 pesos, pero los precios internacionales del petróleo decrecieron y con esto dejó de ser necesario elevarlo más. Incluso, al comienzo de la medida, la subida se iba a aplicar mes a mes, pero la variación en los mercados globales hizo que esta no tuviera que efectuarse en todos los períodos.