Colombia está siguiendo los pasos de países líderes en pagos en tiempo real como India, España y Brasil, con un avance significativo en la adopción de estas tecnologías. Más de 15,8 millones de colombianos ya han registrado su celular para realizar transferencias interbancarias inmediatas a través de plataformas como Transfiya, el sistema desarrollado por ACH Colombia.
Esta cifra representa el 44 % de la población bancarizada del país y refleja el creciente impacto de los pagos digitales en la economía nacional.
Los sistemas de pagos en tiempo real están transformando la forma en que las personas y las empresas manejan sus transacciones financieras. Estos sistemas permiten la transferencia de fondos entre cuentas bancarias en cuestión de segundos, sin la necesidad de ingresar datos de cuenta o realizar largos procesos de autenticación. En cambio, los usuarios pueden enviar dinero con solo conocer el número de celular del destinatario, simplificando el proceso de pago de manera significativa.
Camilo Arango, líder de expansión de la fintech Minka, la cual se centra en rieles de pagos digitales, señala que este tipo de sistemas están revolucionando la manera en que los colombianos gestionan su dinero. “En los últimos cinco años, ha cambiado la manera como transferimos y movemos el dinero en Colombia. El sistema financiero tradicional es como una cebolla: con capas que se superponen, una sobre otra. Capas de procesos financieros que por décadas obstaculizaron la fluidez y la eficiencia en las transacciones”, comenta Arango.
Así, con la llegada de nuevas tecnologías y protocolos inspirados en blockchain, los pagos interbancarios ahora son inmediatos, seguros y accesibles para millones de usuarios.
El éxito de Transfiya en Colombia no es un fenómeno aislado, sino parte de una tendencia global en la digitalización de los pagos. En todo el mundo, nuevas tecnologías han permitido que más de 1.700 millones de personas utilicen sistemas de pago en tiempo real.
Países como India, España y Brasil han liderado esta revolución con sistemas como UPI, Bizum y PIX, respectivamente, que no solo han facilitado las transacciones cotidianas, sino que han reducido el uso del efectivo, impulsando la inclusión financiera y la modernización del sector.
En India, por ejemplo, UPI (Unified Payments Interface) ha alcanzado los 700 millones de usuarios, lo que representa el 48 % de su población bancarizada. PIX en Brasil ha registrado 160 millones de usuarios, con una penetración del 74 %. En España, Bizum cuenta con 27 millones de usuarios, lo que representa el 56 % de la población bancarizada. Estos casos de éxito han demostrado cómo la adopción masiva de pagos en tiempo real puede transformar una economía, y Colombia está bien encaminada para replicar esos logros.
Colombia, ha logrado que el 44 % de su población bancarizada utilice este sistema para pagos inmediatos, una cifra que continúa creciendo mes a mes. El sistema ya procesa más de 25 millones de transacciones al mes, convirtiéndose en uno de los principales métodos de transferencia entre bancos en el país.
“Aunque UPI en India, Bizum en España y PIX en Brasil son referentes mundiales en pagos en tiempo real, Colombia no se queda atrás y ha emergido con su propio caso de éxito en Latinoamérica: Transfiya, obteniendo un rápido nivel de adopción que se acerca fuertemente al de la India y España”, concluye Arango.
La facilidad y rapidez de estos sistemas no solo benefician a los usuarios individuales, sino también a las empresas y al comercio en general. Los pagos en tiempo real permiten que las pequeñas y medianas empresas (pymes) reciban pagos de manera instantánea, mejorando su flujo de caja y facilitando la gestión de sus finanzas, y reducen la dependencia del efectivo.
Además de estos beneficios, las soluciones digitales contribuyen a una mayor transparencia en las transacciones financieras y a la formalización de la economía. Por eso, el auge de los pagos en tiempo real también está alineado con los esfuerzos de los gobiernos y organismos internacionales, pues puede aumentar la inclusión financiera a nivel mundial. De hecho, según el Banco Mundial, 2.500 millones de personas no utilizan servicios financieros formales y el 75 % de los pobres no tienen acceso a una cuenta bancaria.
La expansión de sistemas de pagos en tiempo real puede verse como una herramienta clave para cerrar esta brecha y ofrecer a más personas acceso a los servicios financieros.
Con un crecimiento constante en el uso de estos sistemas, Colombia se proyecta como un modelo a seguir en América Latina, consolidando su avance hacia una economía más digital e inclusiva. La capacidad de realizar pagos instantáneos entre bancos no solo facilita la vida de millones de colombianos, sino que también abre nuevas oportunidades para el comercio y el desarrollo económico.