“El sistema pensional está haciendo agua”. Ese fue uno de los mensajes que les entregó el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, a los congresistas de la comisión tercera del Senado, a la que fue citado a debate de control político, junto con la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, previo a los debates de estudio, aprobación y votación, si así lo deciden los parlamentarios.
El pulso fue fuerte. El funcionario que lleva la cartera de las finanzas no solo argumentó que el sistema pensional tiene más de cinco décadas y solo se ha reformado dos veces (entró, se reformó hace 28 años y ahora se tramita un nuevo cambio). La situación ya no daría más. El país tiene casi dos millones de personas entre prepensionadas y pensionadas de Colpensiones, que demandan recursos por 52 billones de pesos, y hay que resolver el tema de la fuente de financiamiento.
El ahorro viene en picada en el país
En ese contexto, sostuvo que la reforma pensional, sin el pilar solidario —uno de los cuatro que tiene la propuesta— tendría un costo fiscal equivalente a la generación de ahorros.
Las cuentas presentadas por Bonilla fueron posteriores a la intervención de Santiago Montenegro, presidente de Asofondos, gremio de fondos privados de pensiones (AFP). El directivo gremial había dicho que “se necesita una buena reforma, no cualquier reforma”, sustentando que el debate para construir las modificaciones al sistema debe estar libre de ideologías que, a su juicio, “resultan improductivas”.
No obstante, Bonilla llegó con números en mano. Explicó que Colombia viene perdiendo ahorro —y no solo pensional— desde hace 30 años, lo que conectó con la crisis del mercado de valores, algo que debe ser analizado con lupa.
Lo que pasó y le pareció curioso a Bonilla
Explicó que el objetivo de la reforma es promover que los ciudadanos tengan mayor certeza de que hay que ahorrar para la vejez y que tienen que hacerlo temprano. “La gran diferencia —enfatizó Bonilla— es que cuando lleguen a Colpensiones (lo que de todas formas harán con o sin reforma), solo tendrán un costo de administración de 1,2 %. El resto va para pagar pensiones, hoy, en los fondos privados, ese costo es de 4,5 %”.
El ministro Bonilla mencionó algo que le pareció curioso en los resultados de 2023 en Colpensiones: “Tiene un excedente en los costos de administración de 600.000 millones, es decir, tiene 1,2 % y le sobra plata”.