La crisis política que vive Venezuela, que podría llevar a un endurecimiento de las sanciones impuestas sobre el régimen de Nicolás Maduro, sumada a la deficiente infraestructura del gasoducto binacional e incluso de la explotación de gas en el vecino país, llevaron a que el ministro de Minas, Andrés Camacho, aceptara ante el Congreso que hoy no es posible cumplir el plan del gobierno de traer gas desde Venezuela.
En medio de un debate de moción de censura en su contra, Camacho señaló que el contrato para comercializar gas entre los dos países está firmado desde 2007, lo que implica que no se originó en el presente gobierno, pero que no se ha podido hacer ningún comercio por razones como la situación política y las sanciones a Venezuela; además, “por unas decisiones ideológicas de su momento, se averió la infraestructura del gasoducto, lo que hace que hoy en la práctica no hay posibilidad de importar”.
Añadió que, pese a que se ha intentado señalar que esa importación ya es un hecho, “hoy políticamente, técnicamente, financieramente no podemos importar gas de Venezuela”.
El ministro explicó que, ante esa realidad, desde su cartera están desarrollando el plan de abastecimiento de gas, que consiste inicialmente en una coordinación interinstitucional con las empresas del sector ACP, Naturgas, ANH, Ministerio de Minas y Energía y Anla, con el objetivo de evitar un desabastecimiento. También tienen planeada una modernización normativa y una optimización contractual y operacional del sector.
Además, el anuncio del yacimiento Uchuva 2 “nos puede dar seguridad energética para 2040- 2050. No me atrevería a certificarlo porque parte del trabajo técnico que tiene que desarrollar Ecopetrol es garantizar cuánto volumen vamos a tener disponible, pero efectivamente lo que estamos trabajando es que esa exploración que se está desarrollando sea exitosa y nos dé el gas necesario para que el país pueda transcurrir la transición energética”, reiteró.
Las palabras de Camacho llegan en medio de una creciente preocupación por la posibilidad de importar gas de Venezuela, en caso de que se llegaran a superar las complicaciones técnicas, debido a la inestabilidad de ese país y lo riesgoso que sería depender de un proveedor que no es constante y que podría cortar el suministro de un momento a otro, incumpliendo contratos.
“No podemos centrar nuestras expectativas ante la escasez de gas actual en una fuente incierta como Venezuela, comenzando por la viabilidad jurídica. Hoy no se puede comercializar gas con PDVSA por unas sanciones principalmente de la Ofac que prohíben y restringen ese proceso de compra y venta de gas. Mientras esa autorización, que ya Ecopetrol la solicitó en noviembre del año pasado, no llegue, no podemos concentrar nuestros esfuerzos y expectativas en un gas importado desde Venezuela, porque aquí acabamos de evidenciar que es inminente que nos toca sumar a las fuentes locales, fuentes de gas importado para cubrir el 100 % de la demanda”, le dijo recientemente a SEMANA Luz Stella Murgas, presidenta de Naturgas.
De hecho, el presidente de Ecopetrol Ricardo Roa también ha señalado que se están evaluando otras opciones de fuentes externas y de importación, como la de la planta de regasificación en el Pacífico, la de La Guajira y también importar en cilindros grandes, lo que se conoce como microgas natural licuado, micro LNG.
“Nos toca tener varias opciones y nos toca habilitarlas lo antes posible porque la única viable hoy y que podemos utilizar de manera inmediata es la planta de regasificación que está en Cartagena, pero sólo hasta la capacidad adicional que no tengan contratados los térmicos”, precisó Murgas.
Por otro lado, durante el debate de moción de censura en la Cámara de Representantes, el ministro de Minas reconoció que desde el gobierno del presidente Gustavo Petro contemplan que el siguiente mandato sea progresista. “Nosotros como gobierno tenemos una causa que es la del cambio e implica transformar esos problemas estructurales en estos dos años. Vamos a intentar lo que más podamos, en lo que nos queda. Estamos trabajando para que, en el siguiente gobierno, que esperamos sea progresista, continúe la senda de transformación de este sector que, por lo general, estuvo en manos de quienes han acumulado riqueza en este país”, enfatizó.