La ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, tuvo el primer gran encuentro con empresas mineras de todo el país y aprovechó para presentar las propuestas y reformas que se realizarán en el sector durante el gobierno del presidente Gustavo Petro.
Para tranquilidad del sector minero, la ministra aseguró que se quiere tener “un respeto a los debidos procesos”, lo que significa que “la titulación existente se va a respetar”, al igual que todos los derechos adquiridos por las compañías mineras que operan en el país.
Sin embargo, también anunció que se hará una revisión de la titulación minera en Colombia para confirmar si las empresas “tienen una responsabilidad fiscal y ambiental”.
Actualmente, en Colombia hay más de 6.300 títulos en etapa de explotación, equivalentes a más de 2,23 millones de hectáreas del territorio nacional. Solo el 1,8 % de los títulos del país son de gran minería, los demás son de pequeña y mediana minería de personas naturales y jurídicas nacionales.
La ministra de Minas y Energía también habló de crear “nuevos modelos de asociatividad empresarial”, esto quiere decir que en el sector minero y energético se implementarán modelos de asociación público privada popular para que las comunidades locales tengan más participación en las acciones y decisiones que se tomen en sus territorios frente a la explotación minera y generación de energía.
“Creemos que este modelo permitiría resolver conflictos históricos que este sector (minero) conoce muy bien y es que, cuando una empresa llega a un territorio vincula a la comunidad solamente como participante o consultada, y la comunidad no se siente involucrada ni que tenga una capacidad de decisión sobre lo que está sucediendo en su territorio, que luego son difíciles de gestionar posteriormente”, dijo la ministra.
Otra de las propuestas que compartió la ministra Irene Vélez fue un “ordenamiento legal de la minería”, el cual tiene que ver con actualizar el Código de Minas, que lleva más de dos décadas vigente y “necesita leerse a la luz de las banderas que se han generado para los pequeños mineros, especialmente, mineros tradicionales”.
“Queremos propiciar una participación vinculante que es un diálogo con las empresas y los gremios, pero también implica dialogar con quienes son sectores mineros tradicionales, marginalmente excluidos del diálogo institucional. A los pequeños mineros les hemos dado un diálogo menos relevante en término de la incidencia que puedan tener en la política pública. Nosotros queremos en este Gobierno dar un vuelco”, agregó.
En ese sentido, la minería tradicional será una prioridad para la ministra de Minas y Energía, pues asegura que “hay una desventaja que se ha creado respecto a la formalización para la minería tradicional, que existe en los marcos normativos que en este momento nos rigen”. Por eso, buscará brindar más oportunidades para la minería tradicional (artesanal), los cuales deberán ser legislados.
En medio del Congreso Nacional de Minería, que organiza la Asociación Colombiana de Minería (ACM), la ministra también se refirió a la transición energética y aseguró que es urgente para descarbonizar la economía y cumplir con los compromisos de cambio climático que ha adquirido Colombia, pero advirtió que esto “puede generar también un exacerbado extractivismo”.
La ministra aseguró que esto no significa que el actual Gobierno no le esté apostando a la minería, pero sí “para insistir que no vamos a caer en el error de extractivismo, que puede ser social y ambientalmente costoso, que luego se reflejan en la económica general de la nación”.
Finalmente, la ministra se refirió a la minería en páramos y el proceso que se lleva desde hace varios años para la nueva delimitación del páramo de Santurbán. “En el marco de la regulación de los límites de los páramos se debe avanzar prontamente en un ejercicio de sustitución minera que asegure que estamos protegiendo el recurso hídrico de la nación”, afirmó.