Crear músculo financiero para combatir tres crisis interconectadas, como son la lucha contra la pobreza, la descarbonización de la economía y la protección de la biodiversidad, son los objetivos a tratar en la cumbre internacional en París, con mandatarios, directivos de instituciones y expertos climáticos que se llevara a cabo este 22 y 23 de junio.

Francia, país anfitrión, presentará la “Cumbre para un nuevo pacto financiero mundial” como un laboratorio de ideas, capaz de aglutinar apoyos y dibujar una hoja de ruta de cara a otras citas internacionales a corto y medio plazo.

Sobre la mesa están ideas como un gravamen al comercio marítimo, ampliar la capacidad de préstamo del Fondo Monetario Internacional (FMI) y los bancos regionales de desarrollo, aliviar la deuda de los países más vulnerables y movilizar mejor al sector privado.

En la cita, precedida el miércoles por la reunión anual del Club de París, estarán representados más de 80 países, Rusia no figura entre ellos porque no fue invitada, y se esperan más de 40 jefes de Estado y de gobierno.

El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, su par colombiano, Gustavo Petro, y el cubano, Miguel Díaz-Canel, asistirán a la cumbre, según la organización.

Igualmente, se espera al primer ministro chino Li Qiang, a la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, a la presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen y a la vicepresidenta del gobierno español, Nadia Calviño.

Lucha contra la pobreza, la descarbonización de la economía y la protección de la biodiversidad, son los objetivos a tratar en la cumbre internacional en París, | Foto: Copyright 2021 The Associated Press. All rights reserved.

La cita se producirá en un contexto de desconfianza de los países del Sur, que se quejan de que las naciones del Norte dicen no tener dinero para ayudar en la lucha contra el cambio climático y la pobreza, pero sí para apoyar a Ucrania o reflotar bancos norteamericanos.

“Está muy bien hablar de la arquitectura financiera internacional, pero necesitamos plazos, y de momento no los estamos viendo”, dijo a AFP Sara Jane Ahmed, consejera financiera del V20, un grupo de 58 países vulnerables, que incluye a once naciones de América Latina y el Caribe, entre ellas Colombia, Costa Rica y Honduras.

ARCHIVO - En esta fotografía de archivo del 18 de mayo de 2021, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, habla al final de la Cumbre sobre el Financiamiento de las Economías Africanas, en París. El organismo rector del FMI aprobó el lunes 2 de agosto una expansión de $ 650 mil millones en los recursos de la agencia para apoyar a los países económicamente vulnerables que luchan contra la pandemia de coronavirus y la recesión económica que ha causado. "Esta es una decisión histórica ... y un tiro en el brazo para la economía mundial en un momento de crisis sin precedentes", dijo Georgieva. “Ayudará particularmente a nuestros países más vulnerables que luchan por hacer frente al impacto de la crisis de COVID-19”. (Ludovic Marin, Pool vía AP, Archivo) | Foto: Copyright 2021 The Associated Press. All rights reserved

“Si empezamos a hacer todo esto en la década de 2030, será mucho más caro y las soluciones serán bastante más difíciles”, advirtió.

Las necesidades son inmensas. Un grupo de expertos independientes creado por iniciativa de la ONU estimó que para 2030 los países en desarrollo, excluyendo a China, deberán estar invirtiendo más de dos billones de dólares anuales para responder a la crisis climática.

En el V20 figuran 11 países latinoamericanos y del Caribe, entre ellos Costa Rica, Colombia, Honduras y Nicaragua. | Foto: Cortesía PwC

Más específicamente, la presidencia francesa quiere darle “impulso político” a la idea de una tasa internacional a las emisiones de carbono del comercio marítimo, a pocos días de una importante reunión de la Organización Marítima Internacional (OMI).

Según los expertos, dicha tasa podría aportar 20.000 millones de dólares por año.

Los debates abordarán otras iniciativas, como la idea de suspender el pago de la deuda en caso de catástrofe natural, muy defendida por la primera ministra de Barbados, Mia Mottley.

También está sobre la mesa la idea de un gravamen internacional a las transacciones financieras, que tiene muy pocas opciones de concretarse.

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID), representado por su presidente Ilan Goldfajn, y otras instituciones regionales serán invitadas a aumentar su capacidad de préstamo, después de que el Banco Mundial anunciara que prestará 50.000 millones de dólares más durante la próxima década a los países que lo necesiten.

El nuevo presidente del Banco Mundial, Ajay Banga, estará en París, al igual que la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva.

Entre la “caja de herramientas” de soluciones posibles, figura precisamente la idea de reciclar 100.000 millones de dólares de derechos especiales de giro, la moneda de reserva del FMI.

Con información de la agencia AFP.