La reforma pensional impulsada por el presidente Gustavo Petro sigue adelante en el Congreso de la República y continúa su proceso de aprobación en la plenaria del Senado, donde va en el segundo de 4 debates.
Además, diversos líderes de la oposición han expresado su preocupación, argumentando que esta reforma podría comprometer los ahorros de los colombianos.
Y es que este es uno de los proyectos que más polémica ha generado entre los sectores económicos del país. Principalmente, por la sensibilidad que provoca el hecho de involucrar el aseguramiento para la vejez.
Uno de los puntos álgidos de la reforma pensional ha sido el relacionado con la medida que plantea el paso de cotizantes de fondos privados a Colpensiones, hasta cierto monto en salarios mínimos, umbral que aún no se define.
De esa manera, serían billonarios los recursos que tendría que manejar Colpensiones, por lo que se planteó que sea el Banco de la República la entidad que se encargue de administrar los recursos de Colpensiones.
Sobre esta propuesta, Munir Jalil, economista jefe para la Región Andina de BTG Pactual, explicó: “Como tal no existe. Supongo que lo que buscan los proponentes de esa idea es utilizar una institución como el Banco, altamente respetada y con un manejo de las reservas internacionales muy transparente, para que administre esos recursos”.
El experto agregó que, “lo que habría que entender es que el objetivo de las reservas internacionales que maneja el Banco de la República difiere de forma significativa del que tendría el ahorro pensional. De esta manera, el Banco de la República tendría que, muy probablemente, contratar administradores de portafolio especializados para ello. Esta situación estaría lejos del mandato que se le ha dado al banco central, pero estrictamente no significa que no lo pueda hacer”.
El Banco, también a petición de académicos
Varios académicos destacados, incluyendo decanos de facultades de renombradas universidades y directores de centros de pensamiento económico, han enviado una carta urgente a los congresistas involucrados en el debate sobre la reforma pensional.
Entre los firmantes de la carta, que sugiere cuatro modificaciones clave al proyecto de ley, se encuentran economistas de la Universidad de los Andes como Marcela Eslava, Óscar Becerra y Marc Hofstetter.
La misiva también cuenta con el apoyo de César Tamayo, decano de economía de Eafit, Juan Carlos Gutiérrez, de la misma universidad; Esteban Piedrahíta, rector de la Universidad Icesi, además de Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, y José Ignacio López de Anif.
Los académicos proponen tres cambios específicos en el proyecto. Uno de ellos aborda el umbral de ingresos a partir del cual las personas serán transferidas automáticamente de fondos privados a Colpensiones, recomendando reducir este límite de los tres salarios mínimos propuestos en la ponencia a 1,5 salarios mínimos. Esta sugerencia se hace a pesar de un acuerdo previo con los liberales de establecer el umbral en 2,3 salarios mínimos, punto que aún no se ha debatido.
Sostienen que, basados en estudios exhaustivos del sistema de protección para la vejez en Colombia, están bien fundamentados para recomendar al Congreso de la República hacer cambios significativos que mejorarían el proyecto.
Entre sus propuestas, destacan que la gestión del fondo de ahorro del componente de prima media del pilar contributivo debería estar a cargo del Banco de la República, supervisada por un comité mayoritariamente compuesto por miembros expertos e independientes.