La llegada del Gobierno Petro al poder representó un cambio para varios sectores empresariales del país, los cuales empezaron a padecer una mayor incertidumbre tras las propuestas, que para muchos analistas pueden ser peligrosas para los sectores económicos que impulsan las cifras.
Una de las ideas que más ha causado daño a la economía y que ha elevado la inquietud frente al futuro del país es el anuncio que hizo el mandatario hace poco más de un año, cuando aseguró que el Gobierno no volvería a firmar contratos de exploración y explotación del hidrocarburo.
Esa directriz estaría amenazando la soberanía energética con la que cuenta el país. Es decir, la capacidad de autoabastecerse con el energético que se obtiene en suelo colombiano y la posibilidad de no depender de los hidrocarburos de otros países. Además, la coyuntura llega en un momento problemático, tras un posible riesgo de desabastecimiento de gas para 2025.
Es por ello este 20 de septiembre, el representante a la Cámara por Antioquia, Juan Espinal, radicó ante la plenaria una proposición para solicitarle al presidente Petro, al ministro de Minas y Energía y a los presidentes de Ecopetrol y ANH, levantar de manera inmediata la suspensión de firmar contratos de hidrocarburos. Dicha iniciativa fue firmada por 24 parlamentarios de la corporación mencionada.
“La crisis de gas natural afectará a todos los colombianos, debemos aumentar la producción local y generar seguridad energética en el país”, aseguró Espinal en uno de sus videos.
En la misiva, Espinal señala que garantizar el abastecimiento energético es fundamental para la vida cotidiana de los 37 millones de colombianos, lo que representa a su vez 12 millones de hogares, además de la industria, el comercio y el transporte del país.
Además, también recordaron las advertencias hechas por las asociaciones ACP y Naturgas, quienes realizaron una importante alerta sobre la tutela que suspende la exploración del pozo Uchuva 2, afectando el suministro de gas.
“Este proyecto cumplió la fase exploratoria con los requisitos regulatorios, incluida la certificación de no presencia de comunidades indígenas en el área de influencia, además de la decisión de la ministra de Ambiente, Susana Muhammad, quien frenó el licenciamiento del proyecto Costa afuera, Komodo 1″, indicó.
Concluyen la proposición asegurando que este fallo estaría negando la posibilidad de aprovechar el potencial de 400 millones de pies cúbicos por día (mpcd), que es suficiente para recuperar la autosuficiencia energética en el mediano plazo. Todo esto, con especial atención a la crítica disminución de reservas de gas en el país que, a partir del 2025, se haría efectivo si no se desarrolla el potencial de proyectos costa afuera.
“Solicitamos que esta proposición sea remitida a la Procuraduría General de la Nación, la Contraloría General de la República y la Defensoría del Pueblo para su conocimiento y seguimiento”, indicó.
¿Qué pasó con la suspensión de Ecopetrol por gas natural?
Ecopetrol confirmó este jueves, 19 de septiembre, la suspensión temporal del suministro de gas vehicular a 13 empresas distribuidoras debido a una contingencia provocada por la escasez de lluvias. Esta situación ha llevado a un aumento en la generación de energía mediante termoeléctricas, que dependen del gas como combustible, lo que ha generado una presión adicional sobre los recursos disponibles.
Algunas de las empresas que se verán afectadas directamente por esta medida se encuentran reconocidas distribuidoras como Terpel, Alcanos, Efigas y Gases del Caribe. Todas ellas tienen contratos de firmeza condicionada con Ecopetrol, los cuales incluyen cláusulas que permiten la suspensión del suministro en situaciones de emergencia como la que enfrenta el país actualmente.
Ecopetrol, mediante un contrato de firmeza condicionada, detalla que se compromete a garantizar un suministro máximo de gas durante un período específico, con la salvedad de que dicha garantía puede verse afectada si se presenta la condición de probable escasez. Esta condición se activa cuando el precio en el mercado alcanza el 95 % del precio de escasez de activación, un indicador crítico para la gestión de recursos energéticos.