El proyecto de presupuesto 2022 quedó a mitad de camino, luego del debate en las comisiones económicas legislativas, en el que aprobaron los 126 artículos de la ponencia elaborada entre parlamentarios y el Gobierno.
El presupuesto es la carta de las finanzas públicas para el próximo año, el cual sigue dando señales de ser complejo, pues el país adquirió más deuda, tiene ingresos menguados y las necesidades de inversión son muchas después de una crisis sanitaria y económica sin precedentes.
En ese contexto, los recursos que dispondrá el Estado en 2022, para cubrir gastos de funcionamiento, pagar deuda y realizar inversiones que permitan impulsar la reactivación económica y el empleo, ascienden a $350,4 billones, de los cuales, el 59,6 % serán para gastos de funcionamiento.
Sobre ese punto, durante los debates previos a la aprobación del proyecto de Presupuesto, el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, había argumentado que el 83% de los gastos que hay que hacer en Colombia con los dineros públicos, son inflexibles, es decir, no hay margen de maniobra. Por ningún motivo se puede aplazar el pago de las pensiones, las amortizaciones de la deuda e, inclusive, las transferencias monetarias que se hacen a los colombianos más vulnerables.
Deuda e inversión
Además del rubro destinado al funcionamiento, que asciende a $209 billones, los otros dos grandes componentes del presupuesto son, el servicio de la deuda, para el cual se dispuso de $78 billones, mientras que a la inversión se le asignan $68,2 billones. Precisamente del monto destinado a la deuda es de donde siempre se sacan recursos para redistribuir en los sectores que hacen parte del presupuesto, y esta vez no fue distinto.
Críticas a la repartición de la torta
Durante el debate de aprobación del proyecto de presupuesto, no faltaron las críticas habituales, provenientes de los que reclaman para aumentar asignaciones presupuestales a ramas que son consideradas de importancia estratégica para el país, como la agricultura. Varios parlamentarios abogaron por aumentar los recursos para el campo, los cuales, nunca se ven como suficientes para sacar las zonas rurales del rezago en el que se encuentran, en comparación con las áreas urbanas. Al agro le corresponderán $2,4 billones, desde los $2,3 billones que tenía en el proyecto original.
En el trámite que surtió el presupuesto 2022 en las comisiones económicas, también surgieron reparos a la asignación que tendrá el próximo año el sector defensa, el cual contará con $43,1 billones, mientras que a la inversión para la paz se le ha venido recortando plata desde hace varios años, según sostuvo el senador de oposición Gustavo Bolívar. “El presupuesto para la paz fue de $6,7 billones en 2017 y para 2022 será de $0,78 billones”, dijo a través de sus redes sociales.
Hay que destacar que, según el proyecto aprobado en primer debate, el sector educación sigue a la cabeza, con la mayor asignación presupuestal: $49,4 billones, y le sigue el sector salud, con $41,8 billones.
Viene un segundo debate espinoso
Todos esos temas volverán a destaparse en el segundo y último debate en las plenarias de Senado y Cámara, a donde llegará el proyecto de presupuesto 2022 con 75 proposiciones adicionadas en el debate del miércoles 22 de septiembre.
Pero nada como las dos controversiales propuestas que ya tuvieron su momento difícil en las comisiones económicas: el artículo que ajusta la Ley de garantías y el que permite los traslados pensionales, desde los fondos privados de pensiones, hacia Colpensiones.
¿Podrán tumbarlos?
Varios abogados consultados sobre lo sucedido en el Congreso con los dos polémicos artículos, coinciden en afirmar que podrían presentarse demandas. Aunque advierten que aún no han estudiado a fondo los posibles caminos judiciales que puedan tomar los inconformes con la introducción de una modificación a la Ley de garantías, para que más de 1.100 alcaldes y gobernadores puedan seguir la ejecución de los recursos públicos, aún ante la proximidad de las elecciones (hasta el momento estaba prohibido, para reducir el riesgo de corrupción con recursos públicos), lo cierto es que la falta de unidad de materia de los temas en cuestión, con un proyecto de presupuesto, podría motivar acciones jurídicas.
Ya hay anuncio de demanda
Durante el debate de aprobación del presupuesto 2022, la representante a la Cámara por el partido Verde, Katherine Miranda, tramitó una proposición que pedía tumbar el artículo relacionado con la Ley de garantías. Sin embargo, su propuesta fue derrotada por mayoría, y las intervenciones que respaldaban que se mantuviera en el texto de la carta financiera del país, sostenían que no era un ‘mico’, sino la respuesta al clamor de los mandatarios locales, que pedían que se les dejara seguir haciendo inversiones en las regiones.
No obstante, al ser consultada por SEMANA, Miranda sostuvo que, en el segundo debate de estudio y aprobación del proyecto de presupuesto 2022, en plenarias, volverá a dar la batalla para eliminar el artículo y, de volver a ser derrotada, avanzaría en una demanda.
Y de los traslados pensionales
Por el lado del artículo que avala el traslado pensional, desde los fondos privados hacia Colpensiones, el exministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, sostuvo que también podría tener enredos. Al tratarse de una medida que pone una condición para permitir el traslado (número de semanas), podría llevar al reclamo al derecho a la igualdad, puesto que no habría razón para que a unos los dejen pasar de un fondo pensional al otro, y a los demás no.
Lo cierto es que, el proyecto de presupuesto, que apenas va en la mitad del camino, no tiene aún la ruta despejada. Sin duda, en unas cuantas semanas, empezará de nuevo la polémica.