El dólar en los mercados internacionales parece tranquilizarse, tras los repuntes en los días pasados, apalancados por los resultados de la inflación en los Estados Unidos, incertidumbre por posibles reajustes de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal (FED por sus siglas en inglés), entre otros factores internacionales.
No obstante, en Latinoamérica, varios Bancos Centrales han comenzado a disminuir sus tasas de intervención, lo que ha hecho que el dólar ceda su cotización, y genere más atractivo para los inversionistas, como lo es el caso de Chile.
Estas correcciones se han logrado, gracias a la disminución de la inflación, y estas medidas ya se sienten en la cotización del dólar. Para la jornada del 18 de septiembre, la moneda estadounidense se negocia en 884,61 pesos por unidad. Esto representa una reducción de 0,39 pesos, frente al tipo de cambio con el que se cerró el día 15.
De hecho, esa ligera reducción es un alivio para el mercado chileno, pues en las dos primeras semanas del noveno mes del año, el dólar se había encarecido poco más de 30 pesos, por lo que se prevé que la divisa por fin se estabilice, o de hecho pueda retroceder un poco.
Hay que tener en cuenta que la nación austral fue de las primeras en recortar sus referencias, que como en la mayoría de países, llegaron a los registros más altos de su historia, pero, que ya lograron comenzar a reducir, y actualmente la tasa de interés se ubica en el 10,25 por ciento.
Los mercados están muy sensibles ante las cifras del mercado laboral en China, donde se reportó que el desempleo es del 5,2 %, y que las ventas del comercio minoristas han aumentado, ubicando su registro interanual en el 4,6 %, lo que le cae muy bien al peso chileno, sobre todo porque esto reactivaría la compra del cobre.
Sobre esto último, el Instituto Nacional de Estadísticas de Chile (INE), anunció que con corte a julio del 2023, el índice de inventarios de la minería del cobre creación el 1,4 %, en comparación con el mes anterior.
El alza de los productos de la minería aportó un 0,946 % y junto con los insumos industriales, los cuales contribuyeron en 0,415 puntos porcentuales, fueron los principales aportantes a dicho indicador.
El repunte de la economía chilena le trae calma a los inversionistas
Hace unas semanas, el Banco Central publicó que la actividad económica chilena creció en julio, un 1,8 %, siendo un registro muy bueno, teniendo en cuenta que por cinco meses registró números negativos.
Se estima que para el cierre del 2023, el producto interno bruto (PIB), ronde entre el - 0,5 % y el 0,25 %, dándole así una luz de esperanza a la economía, para no acabar con un saldo negativo.
Según el ministro de hacienda, Mario Marcel, la economía del país ya casi está por estabilizarse, teniendo en cuenta de la considerable caída de la inflación, que lo lleva a pensar que al finalizar el año, pueda rondar el 4 por ciento.
De acuerdo con sus declaraciones en varios medios y agencias internacionales, las medidas en materia de política fiscal y monetaria, tienen prácticamente estabilizada la economía, lo que ya se nota en el PIB, además de la alta demanda de commodities como el cobre, les ha permitido revertir la situación macroeconómica.
Se espera que en las próximas semanas, se mantengan las tendencias reduccionistas en la inflación y las tasas de interés, lo que podría atraer la inversión extranjera, y reactivar la economía, no solo de Chile, sino de la región latinoamericana en general, que para el cierre del 2023, sería una de las protagonistas a nivel mundial.