Hace algunos días, el sector de la construcción tuvo un duro revés, luego de que el Ministerio de Vivienda anunciara la suspensión definitiva del programa ‘Mi casa ya’, uno de los subsidios más importantes del país para comprar vivienda con tasas de interés diferenciales y con menores cuotas mensuales.
Mediante una circular, el Ministerio de Vivienda emitió su pronunciamiento sobre el asunto. La comunicación provino directamente del Fondo Nacional de Vivienda (Fonvivienda), organismo vinculado a dicho ministerio.
En el documento, se señala que debido a la situación presupuestaria actual del Estado y considerando el contexto macroeconómico favorable en el mercado, es imprescindible reconsiderar algunos aspectos de la implementación de la política pública en materia de vivienda.
En el comunicado, la cartera aseguró que los cupos disponibles para el beneficio de las distintas coberturas se agotaron, por lo que los hogares que estaban a punto de realizar la marcación para el subsidio, ya no podrán contar con ese beneficio.
En su momento, la Cámara Colombiana de la Construcción, Camacol, se pronunció asegurando que la suspensión del subsidio tendría un fuerte impacto en 45.000 hogares, la mayoría pertenecientes a los estratos dos y tres. Aseguró que las familias serán las que terminarán pagando “los platos rotos”.
Ahora una nueva entidad se pronunció frente al tema y reveló cuál sería el impacto. Se trata de Fedelonjas, la Federación Colombiana de Lonjas de Propiedad Raíz. La entidad aseguró que la suspensión del programa es un golpe para la economía y el sector inmobiliario.
“La suspensión de estos subsidios no solo afecta a quienes planeaban adquirir vivienda nueva, sino que también genera efectos colaterales en el sector inmobiliario, incluyendo el mercado de vivienda usada y arrendamientos. La construcción de vivienda nueva es muy relevante, porque cerca del 25% de lo nuevo se destina a inversión para rentar. Aquí hay que tener en cuenta que 89% de los hogares que arriendan viven en estratos 1, 2 y 3″, dijo Mario Ramírez, presidente de la agremiación.
¿Subirán los arriendos tras la suspensión de Mi Casa Ya?
Otro de los efectos nocivos, que podrían vivir tanto quienes iban a comprar vivienda, como quienes arriendan la misma, es que tras la mayor complicación para adquirir vivienda, se podrían empezar a presionar los precios de los arriendos, especialmente en ciudades intermedias y grandes capitales.
“Recordemos que cuando una familia adquiere un inmueble nuevo, esto potencia la entrada de dicho inmueble al mercado de usados o arriendo. Por eso, el apoyo estatal, mediante subsidios para el acceso a vivienda, es fundamental para garantizar el equilibrio en el mercado inmobiliario”, indicaron.
La suspensión de dichos subsidios además de poner en peligro el sueño de familias colombianas, también amenaza con agravar las dificultades económicas por las que atraviesan miles de colombianos.
“En un momento en el que el acceso a vivienda debería ser una prioridad, la decisión del Gobierno deja en el aire las esperanzas de muchas familias que necesitan de este apoyo para cumplir su anhelo de tener un hogar digno”, concluyen.