El pulso político para incrementar rubros en el presupuesto general de 2022 esta vez podría ser menor, pues el presidente Gustavo Petro, durante la posesión de varios de los funcionarios que harán parte de su equipo de trabajo, pidió a su bancada “no echar atrás, ni con el presupuesto ni con la tributaria”.
Para el mandatario, se hicieron los ajustes a la propuesta financiera que dejó radicada en el Congreso de la República el gobierno saliente, con lo cual, ahora habrá 405.7 billones de pesos para distribuir entre los sectores que son parte del presupuesto nacional.
El monto total de la propuesta financiera ya recibió el aval en las comisiones económicas del Legislativo. Ahora viene la puja por la distribución y desde ya se oyen las voces que reclaman más plata o que defienden el terreno ganado, como es el caso de la ministra de Agricultura, Cecilia López, a quien le incrementaron la destinación de recursos en casi un 100 %, pues recibirá 2 billones adicionales a los 2,06 que tenía originalmente, lo que la llevó a pedirles a los congresistas que no permitan que le muevan la asignación. Esos dineros serán para “compra de tierras, reforma agraria e incremento de la producción agraria en la lucha contra el hambre”, sostuvo el mandatario.
Por los recursos para la paz abogó el senador Humberto de la Calle, quien advirtió que lo estarían recortando en 4,2 %, en comparación con la vigencia actual.
Ya el presupuesto tuvo ‘peluqueada’
Lo que empieza este miércoles en las comisiones económicas del Congreso es la puesta el sombrero, pues en los estrados legislativos se debatirá sobre la distribución de los recursos, según los programas que tiene que adelantar cada sector.
La primera ‘peluqueada’ se dio ya, cuando el gobierno entrante cambió las asignaciones originales, para sectores como educación, que recibirá 1.25 billones de pesos más, los cuales deberán dirigirse a la construcción de infraestructura universitaria, “comenzando en las regiones más excluidas, y para la gratuidad de la educación superior”, sostuvo Petro.
Mientras tanto, la rama de la salud contará con 1,3 billones de pesos adicionales, y la Inclusión Social dispondrá de 1 billón de pesos que no tenía hace unos días.
Prioridades de Petro
Como prioritario mencionó la financiación del catastro multipropósito que tendrá que adelantar el Igac, entidad que, según el Presidente Petro, tendrá que reestructurarse y llenarse de los recursos para hacer esa tarea, que, de acuerdo con los primeros cálculos, demandará billonarios montos del presupuesto.
De igual manera, para Petro es prioritario incrementar la cobertura de agua potable, tema al que le asignan 1 billón de pesos a través del Ministerio de Vivienda.
Para el cambio en el modelo de salud
Al decir del mandatario, “lo que está incluido en el presupuesto deja de ser retórica”. Por eso, hay que resaltar que se reafirma la intención de transformar el modelo de salud que instauró en Colombia la Ley 100. Para ello, en el Presupuesto habrá un incremento de 1 billón de pesos que serán ejecutados por el Ministerio de Salud, “para comenzar el programa de construcción de un modelo alternativo de la Ley 100, que es el modelo preventivo en salud; con el agua, que es un determinante social en salud, y con el comienzo de contratación de equipos médicos para ir casa a casa hasta el territorio más apartado”.
Hay que recordar que el objetivo del mandatario es que la salud debe ser un derecho universal, lo que ratificó en su intervención.
Presupuesto contra las cuerdas
Es común que la mayor parte de los proyectos de ley que tramita el Ejecutivo en el Legislativo se vayan quedando cortos en los cronogramas previstos para su aprobación. En ese terreno de la premura parece estar entrando ya el Presupuesto 2023, que tiene unos 11 días, sin excluir fines de semana, para cumplir con las normas de aprobación establecidas por ley.