Falta poco menos de un mes para la llegada del 2025 y durante el mes de diciembre son varios aspectos los que se discuten y cifras que se fijan para la vigencia siguiente. Uno de ellos es el salario mínimo, cuyo incremento se debate desde el pasado 3 de diciembre y que deberá ser fijado en un primer plazo el próximo 15 de diciembre.
De no ser así el Gobierno tiene un segundo plazo hasta el 31 de diciembre y si no llega a un acuerdo con los gremios deberá definir el aumento por decreto.
Además de la discusión del salario mínimo, tenga en cuenta que también se definen los impuestos sobre los salarios que se fijen el otro año y los aumentos de los mismos. Uno de ellos es la retención en al fuente.
Este impuesto es un mecanismo mediante el cual una persona o entidad, denominada agente retenedor, descuenta un porcentaje de un pago que realiza a otra persona o entidad, y lo entrega directamente al fisco (autoridad tributaria) en nombre del receptor del pago.
Este sistema permite recaudar impuestos de manera anticipada, asegurando que el Estado reciba ingresos constantes.
¿Cuáles salarios pueden sufrir de retención en la fuente para 2025?
Actualmente, el estatuto tributario precisa que la retención a la fuente, según el artículo 383, debe aplicarse a los salarios que sean superiores a las 95 UVT. Tenga en cuenta que para el siguiente año la UVT pasaría de un valor de $47.067 a un valor de $49.799, tras el aumento de la Dian del 5,81%.
Con este incremento, los salarios que tendrían este descuento cambiarían y para el 2025 quienes deberán realizar este aporte a la Dian son los que ganen $4.730.905.
Tenga en cuenta que esta base gravable puede cambiar si usted incluye deducciones obligatorias, como lo son los aportes a pensión, salud y riesgos laborales.
Es decir, si tiene en cuenta el caso de un empleado que no tiene descuentos, la retención aplicaría con la base gravable mencionada de 4,7 millones y un sueldo mensual de 6,9 millones. Tenga en cuenta que esto puede cambiar dependiendo del caso particular de cada empleado.