Los precios del barril de petróleo llegaban a subir este lunes más de un 8 % en los mercados, en respuesta al anuncio este domingo de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep) y sus aliados, con Rusia a la cabeza, reducirán la oferta de crudo en más de un millón de barriles diarios.
De este modo, el precio del crudo Brent, de referencia para Europa, llegaba a subir este lunes hasta los 86,44 dólares por barril, el más alto desde principios de marzo y más de un 8 % por encima del precio marcado al cierre de la sesión del viernes.
De su lado, el precio del crudo West Texas Intermediate (WTI), de referencia para Estados Unidos, subía un 7,8 % hasta alcanzar los 81,58 dólares.
Este domingo, Arabia Saudí anunció un recorte voluntario de su producción de crudo de medio millón de barriles diarios, al que se sumaron en distinta medida otros países de la Opep, mientras que Rusia dijo que ampliará hasta final de año el recorte de 500.000 barriles al día anunciado tras la entrada en vigor del tope al precio de sus exportaciones de crudo.
Hacia las 10H30 GMT, el barril de Brent del mar del Norte subía 5,14 % a 84,00 dólares y el referente estadounidense, el WTI 5,31 % a 79,69 dólares.
El recorte de la producción anunciado el domingo por Irak, Argelia, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Omán, Kazajistán y Kuwait comenzará a regir en mayo y se mantendrá hasta final del año.
Los anuncios se produjeron antes de una reunión por videoconferencia de un panel ministerial de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus países aliados Opep+, un cartel liderado por Arabia Saudita y Rusia. En cambio, Estados Unidos aboga por aumentar la producción ante el aumento de la demanda en un momento en que China reactivó su economía tras levantar las restricciones por la pandemia.
Este anuncio reaviva el temor sobre la persistente inflación y añade más presión a los bancos centrales seguir subiendo las tasas de interés.
La inflación sigue difícil de contener en EE. UU., dice alta funcionaria de la FED
El panorama de la inflación en Estados Unidos ha empeorado desde comienzos de año, lo que podría prolongar la actual batalla de la Reserva Federal (FED, banco central) contra el alza de precios, advirtió el viernes una alta funcionaria de la FED.
El banco central “puede tener más trabajo que hacer” en su lucha contra la inflación si los datos “siguen mostrando una fortaleza de la economía y una desinflación más lenta”, dijo Lisa Cook, miembro del comité de la FED que fija las tasas, en un discurso para una conferencia en Ohio.
La FED ha elevado nueve veces su tasa de referencia desde marzo de 2022, en el marco de un agresivo esfuerzo por de reducir la inflación históricamente alta hacia su objetivo a largo plazo del 2 %.
Pero la reciente agitación en el sector bancario desatada por el colapso del banco Silicon Valley Bank hizo que la FED reconsiderara un aumento drástico en marzo y optara por un alza más pequeña, de un cuarto de punto porcentual.
El presidente de la FED, Jerome Powell, sugirió tras la decisión que la FED podría subir las tasas de interés solo una vez más antes de poner fin a su actual ciclo alcista.
La inflación a 12 meses se moderó en febrero en Estados Unidos para ubicarse en 5 %, frente a 5,3 % en enero, según el índice PCE publicado el viernes por el Departamento de Comercio. Este índice, el más seguido por la FED, muestra que en la medición mes a mes el alza de precios también se moderó.
Sin embargo, en su discurso del viernes, Cook advirtió que la inflación básica, donde no se incluyen precios volátiles como los alimentos o la energía, permanece elevada y muy por encima del nivel que le gustaría ver a la FED.
“El panorama de la inflación es aún menos favorable de lo que parecía a principios de este año”, dijo. “En conjunto, los datos entrantes sugerirían una tasa de inflación algo más alta para este año y un crecimiento económico más sólido”.
*Con información de la AFP.