La relación comercial entre Colombia y Estados Unidos, sin lugar a dudas, se ha fortalecido, luego de la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC), que en unos días cumplirá una década, desde que está en el horizonte del comercio exterior.
El Ministerio de Comercio, junto con ProColombia, presentaron este viernes el balance de lo sucedido desde 2012, cuando el país solo tenía una ventana para vender 5.500 líneas arancelarias al mercado estadounidense, en donde hay más de 300 millones de consumidores.
La firma del TLC entre las dos naciones ha sido criticado en nuestro país, pues se menciona un aprovechamiento más desde aquella orilla que de esta. Y no es para menos, la productividad, el desarrollo tecnológico, las capacidades de comercialización y la cancha que tiene Estados Unidos, no son fáciles de adquirir prontamente en países emergentes como Colombia. Aún así, de acuerdo con las cifras presentadas por las dos entidades involucradas en el comercio exterior de nuestra nación, los avances son innegables.
De los resultados que incluye el informe se desprende que es cierto que Estados Unidos le vende más a Colombia de lo que logramos llevar a ese mercado. Según las estadísticas presentadas por la ministra de Comercio, María Ximena Lombana, las exportaciones colombianas en el sector agropecuario y de alimentos, hacia el país del norte de América han crecido en 4,3 % desde que empezó el tratado, mientras que lo que les importamos a ellos ha aumentado en 11,3 %.
Sin embargo, si antes solo les vendíamos flores y café, ahora ya les llevamos aguacate, limón, uchuva, hierbas aromáticas, tilapia y trucha.
El asunto no es solo poder entrar a ese mercado, según lo consigna el papel. Los procesos de admisibilidad sanitaria, en el caso de productos comestibles, no han sido fáciles de tramitar.
Pero en el contexto general, no se puede desconocer que hay avances en la diversificación de la canasta exportadora hacia Estados Unidos, mucho más allá de los productos minero-energéticos.
Lo que más se tiene en la mira son las exportaciones de bienes no minero-energéticos (agropecuarios, agroindustriales e industriales), segmento que fue el caballito de batalla durante las negociaciones del tratado. Desde que entró en vigor, han crecido en un promedio anual de 4,8 %, teniendo en cuenta que en 2012 representaban 3.415 millones de dólares y, en 2021, la cifra subió a 5.239 millones de dólares.
En número, los exportadores a Estados Unidos no han tenido una variación tan visible. Mientras en 2011, un año antes del TLC, eran 3102, en 2021 son 3.444.
Hay potencial
Desde el MinComercio destacan que, “si bien en 10 años se ha logrado aprovechar este mercado, aún hay un potencial enorme por aprovechar”. Mientras que ProColombia señala la ruta, según la cual, los emprendedores y comerciantes que ya tienen establecidos sus negocios tendrían oportunidades en exportaciones de aceites y grasas, alimentos para animales, atunes frescos, congelados o refrigerados, azucares y mieles, banano, bebidas alcohólicas y no alcohólicas, cacao, café, cereales, crustáceos y moluscos, derivados del cacao, derivados del café, especias, filetes de pescado, flores frescas, follajes, frutas frescas, frutas y hortalizas procesadas, lácteos, legumbres y hortalizas frescas, preparaciones alimenticias diversas, productos de confitería, productos de panadería y molinería, productos procesados del mar, semillas y frutos oleaginosos.
También habría espacio para llevar artesanías, artículos de oficina, artículos del hogar, artículos industriales, artículos promocionales, autopartes, cemento, herramientas, industria gráfica, llantas neumáticas, manufacturas de hierro o acero, maquinaria agrícola, maquinaria industrial, materiales de construcción, metalurgia, muebles -hogar-, muebles -oficina-, otros medios de transporte, partes de otros medios de transporte, vehículos.
Regiones que han aprovechado
Al igual que se hace la relación entre el potencial que tiene Estados Unidos de salir más aventajado con la relación comercial que permite el TLC con Colombia, también entre las regiones de nuestro país sucede lo mismo. Bogotá y Antioquia, como zonas en las que hay más industrias, más mano de obra, más inversionistas, están a la cabeza como las más impactadas positivamente con el acuerdo.
Según los datos de MinComercio y ProColombia, “en 10 años de vigencia del Acuerdo Comercial con Estados Unidos, la región Bogotá-Cundinamarca ha registrado un crecimiento promedio anual de sus exportaciones de bienes no minero-energéticos (agropecuario, agroindustrial e industrial) del 4,6 %.
Entre tanto, las exportaciones del mismo segmento, desde Antioquia a Estados Unidos, en los 10 años de vigencia del TLC, han registrado un aumento promedio anual del 2,4 %.
Sin duda, al cumplirse una década de la firma del TLC con Estados Unidos vendrán las evaluaciones de los analistas y también, seguirán las críticas.