Según la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian), el recaudo tributario en enero fue de $ 18,4 billones. Si bien esta cifra tuvo una caída de 5,4 % frente al mismo mes de 2020, da cuenta de que cada vez es menor la reducción que se presenta.
No hay que olvidar que el año pasado, por cuenta de la pandemia, el Gobierno debió reducir su meta de recaudo, pues tanto empresas como personas naturales se vieron fuertemente golpeadas en sus ingresos y, por ende, en el pago de sus obligaciones impositivas.
Gradualmente, las cifras fueron mejorando y en el primer mes del año se presentó un repunte si se compara con las cifras de cierre del 2020. Es así como en en enero, el 86 % del recaudo estuvo representado en el Impuesto sobre las Ventas (IVA), la Retención en la fuente a título de Renta y los tributos aduaneros.
Estos fueron los recursos recaudados por cada uno:
- IVA: $ 7,4 billones.
- Retefuente de Renta: $ 6,5 billones.
- Aduanas: $ 2 billones.
De otro lado, la Dian confirmó que en enero, el recaudo por gestión alcanzó la cifra de $ 1,1 billones, que, al compararlo con el mismo período de 2020, presenta una fuerte caída de 31 %.
De acuerdo con la entidad, “el Centro Nacional de Cobro gestionó 36.002 obligaciones en mora a través correo electrónico y se efectuaron 26.900 contactos telefónicos con los contribuyentes que presentaban mora en sus obligaciones tributarias para orientar y facilitar el cumplimiento de las mismas”.
Asimismo, se adelantaron 7.300 acciones de cobro dirigidas a contribuyentes con cartera morosa.
La meta de recaudo de impuestos para el 2021 es de $160 billones, cifra que, de alcanzarse, sería un 10 % mayor a la lograda el año pasado, cuando se recolectaron $146,1 billones. Eso sí, hay que decir que por cuenta de la covid-19 y sus efectos económicos, la Dian redujo su meta de 2020 desde $167,5 billones.
De otro lado, es clave mencionar que aunque este año se tramitará otra reforma tributaria y sus bases incluyen temas sensibles como el IVA, la renta y las pensiones, sus efectos directos en el recaudo solo se sentirán entre el 2022 y el 2023.
Bases de la reforma
Esta iniciativa aún está en estudio del Ministerio de Hacienda y el Gobierno nacional, pero ha trascendido que sus bases incluyen aumentos tributarios en algunos rubros, reducción del gasto público y eliminación de un grupo de exenciones que existen en la ley.
El viceministro de Hacienda, Juan Alberto Londoño, dijo hace unos días que no se subirá la tarifa general del IVA (hoy en 19 %), pero algunos bienes y servicios que hoy están en 0 % o 5 % “podrían pagar más”.
De la mano de este ajuste, habrá mayores devoluciones del impuesto a los hogares más vulnerables, de tal modo que se les pueda compensar por dichas subidas.
A la par, el Gobierno también tiene en el radar incrementar el volumen de colombianos que pagan impuesto de renta. Actualmente, esta responsabilidad solo recae en los ciudadanos que ganan desde $4,9 millones al mes, cifra que podría bajar a entre $3,5 millones y $4 millones.
De esta forma, habría un millón más de personas que se harían cargo de este gravamen. Cabe destacar que este intento se ha hecho en otras propuestas de reforma, pero en los estrados legislativos no lo dejan pasar.
Otro nuevo intento por gravar las pensiones altas estaría por darse, si se incluye la gravación a las mesadas de más de $10 millones. Si bien no hay mayores detalles, podría asemejarse al Impuesto Solidario que se creó por la pandemia y ponía a tributar a los pensionados y asalariados del sector público de mayores ingresos.
Sin dudas, esta será una reforma dura de tramitar, por cuenta de la crisis que trajo la pandemia y porque el país entró en año preelectoral. Es sabido que subir impuestos puede afectar el número de votos. No obstante, la caída de 6,8 % del PIB en 2020 hacen necesario retomar el rumbo de las finanzas públicas.