Los parlamentarios se van. Por ello, empezaron a darse los aplazamientos en los trámites legislativos, de las reformas sociales del presidente Gustavo Petro.
Este miércoles 13 de diciembre, luego del debate a la reforma laboral en la Comisión Séptima de Cámara de Representantes, en paralelo, se adelantaba la plenaria del Senado y allí se hizo el anuncio.
La polémica reforma pensional quedará en receso durante la temporada vacacional el primer mes de 2024, pues el segundo debate, que tendrá lugar en la plenaria de Senado, quedó para el próximo año, según anunciaron.
La ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, confirmó la noticia y dijo que celebraba la decisión de los senadores, ya que en este receso los encargados de estudiar y votar el proyecto de ley tendrán el tiempo suficiente para ver el contenido del texto radicado ya para el segundo debate, en profundidad.
De esa manera, podrán comprobar así que se trata de una reforma que “es muy técnica”, sostuvo la funcionaria.
MinTrabajo dice que ha sido consensuada, pero congresistas dicen que no
Si algo le ha sido criticado a la ministra Ramírez, quien tiene a su cargo dos de las tres reformas principales del Gobierno, en cuanto a temas sociales, es que no parece dispuesta a aceptar modificaciones al contenido de los proyectos.
El problema es que, para la ministra, esta reforma sí habría sido socializada y ajustada, según propuestas allegadas al debate nacional que ha suscitado.
Lo cierto es que, en el caso de la reforma pensional, son múltiples los cambios que le han introducido, luego de haber surtido el primer debate en Comisión Séptima y después de pasar a plenaria de Senado, donde debe entrar la ponencia para debate, votación y eventual aprobación.
El segundo debate lo tendrá la pensional hasta el regreso de la agenda legislativa en el próximo año, hacia el 16 de febrero. “Al regreso, en febrero, estaremos frescos y revitalizados, para que efectivamente estas reformas puedan ser discutidas y debatidas de la mejor manera y Colombia pueda tener las reformas que se merece”, dijo Ramírez.
¿Cómo va la reforma?
Pese a las críticas, al término de la sesión del Senado, la ministra expresó que “es una de las reformas más consensuadas. Hay tres puntos en los que tenemos diferencias, la mayor parte de las cuales se relacionan con el pilar contributivo (donde están los aportantes a pensiones)”, recordó.
La reforma pensional parte de un sistema de pilares, el primero de los cuales es el solidario, en el que se busca asignar un subsidio a los colombianos adultos mayores que no lograron ahorrar para tener un seguro en su vejez.
También está el pilar semicontributivo, que sería el que tome las banderas de los Beps (Beneficios Económicos Periódicos), el cual recae sobre personas que aportaron algo, pero no lograron lo suficiente para recibir una pensión como tal.
Y el régimen contributivo, que se divide en dos, el que maneja Colpensiones y el que tienen a su cargo los fondos privados de pensiones. En este caso, hay un punto álgido y es el que se refiere a la propuesta incluida en la reforma, de pasar los ahorros que están en las AFP, hasta 3 salarios mínimos (originalmente era hasta 4 salarios mínimos). En ese sentido, salieron a relucir argumentos, según los cuales, se afectaba el mercado de capitales, al dejar prácticamente desfinanciados a los fondos privados de pensiones, que ponen recursos para hacer inversiones en temas de infraestructura, por ejemplo.
Ese, sin duda, seguirá siendo uno de los puntos polémicos de la Reforma Pensional, cuando salga al ruedo legislativo de nuevo, en febrero del año entrante.