Tras horas de debate, el Senado de la República aprobó la reforma tributaria presentada por el gobierno de presidente Gustavo Petro.
A la luz de ello, se empiezan a revelar algunos de los artículos que fueron aprobados por los congresistas y uno de ellos es que los evasores de impuestos tendrán que pagar sus faltas con cárcel.
Según este artículo, quienes omitan activos por más de 1.000 millones de pesos o caigan en defraudación de impuestos por más de 100 millones de pesos tendrán que pagar con la medida privativa de la libertad.
Sin embargo, vale la pena destacar que la cárcel será para quienes evadan sus impuestos hasta tres veces consecutivas.
La pena de cárcel que tendrá que pagar el evasor iría, dependiendo de la falta, entre los 48 y los 108 meses de prisión.
Casi sobre la media noche, los congresistas lograron la aprobación de la reforma, tras 15 horas de debate y que tuvo desde insultos, peleas, mensajes de protestas y posición a favor y en contra.
Desde ya, los colombianos tendrán que irse preparando para el nuevo esquema de tributación que quedó en la reforma tributaria aprobada, en la que están: un impuesto al patrimonio; modificaciones a la tributación de los dividendos; pago de impuesto de renta con tarifa más alta a personas naturales con más de 10 millones de ingresos mensuales; impuestos a los hidrocarburos; sobretasa en el impuesto de renta al sector financiero y a las electrificadoras; impuestos saludables; eliminación o disminución de beneficios tributarios, tanto para personas como sectores, entre otras medidas.
Vale la pena recordar que durante el debate se estableció que las iglesias no tendrán un impuesto, como lo había propuesto el proyecto desde su texto original. Una iniciativa presentada por la oposición pidió el hundimiento del artículo y así lo hicieron con 59 votos por el sí a la eliminación.
El articulado, en su mayoría, se votó en bloque, pero las propuestas más álgidas, que quedaron para la parte final, enredaron el debate y lo extendieron hasta casi la media noche.
Ahora, habrá que esperar las decisiones que se tomen en la Cámara de Representantes, para definir si será necesaria una conciliación, como lo piden las normas cuando hay diferencias en los textos que aprueban de manera independiente en las dos cámaras.
Uno de los artículos más complejos de la reforma, el del impuesto a los hidrocarburos, recibió el aval, pese a que también se pidió su hundimiento. De él depende gran parte de los recursos que obtendrá el gobierno con el recaudo tributario que dará la iniciativa legislativa una vez se convierta en ley.
Algunos congresistas proponían la eliminación de artículos y el borrón se dio en ciertos casos, como el del número 9, que, según explicó el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, buscaba igualar el derecho de los pensionados colombianos con el de los extranjeros, al dejarles las mismas deducciones cuando tienen a su cargo dependientes. Al final, el artículo fue hundido.
Pero no fue la única propuesta de eliminación de medidas en la reforma, pues al menos una veintena de artículos motivaron peticiones de eliminación. Los opositores al gobierno pedían quitar el impuesto al patrimonio, el de los plásticos de un solo uso, el de las iglesias, y los artículos relacionados con la llamada presencia económica significativa, entre otros. En algunos casos lograron su objetivo.
El estudio de esas peticiones hizo parte de lo que demoró el debate, que comenzó a las 9:30 de la mañana en el Senado, y se prolongó hasta casi la media noche, pues el presidente de esa célula legislativa, Roy Barreras, habló de dar todas las garantías de participación.