Ayer lunes -31 de octubre- fue radicado el texto final de la reforma tributaria y de inmediato se encendió el debate por los cambios que se le hicieron a esta normativa, luego de la ‘peluqueada’ que le hizo el Gobierno Nacional, en atención de los llamados que recibió desde diferentes sectores sociales, económicos y empresariales; por los efectos negativos que se podrían generar con el cambio de impuestos que se planteó inicialmente.
Una de estas advertencias en su momento llegó por parte del sector panificador, el cual calificó como gravísima la intención del Ministerio de Hacienda y la Dian de poner a las panaderías de barrio a pagar impuestos, tal y como estaba planteado en un principio, y señaló que harían desaparecer el pan de 200, el cual pasaría a costar hasta 800 pesos de cara al 2025.
En diálogo con SEMANA; Marcela Morales, directora de la Asociación Nacional de Fabricantes de Pan (Adepan) alertó en su momento que esto dispararía aún más la pobreza, ya que muchas familias tendrían que dejar de comprar este producto, el cual actualmente es de consumo básico para muchos hogares.
Según lo que se indicó por parte de esta asociación y estaba consagrado en el texto inicial de la reforma tributaria, toda fábrica de pan que tuviera ventas netas superiores a 3.500 UVT (Unidades de Valor Tributario) al año, es decir, 133 millones de pesos (unos 11 millones al mes) debía pagar un impuesto, del 10 % para 2023, del 15 % para 2024 y del 20 % para 2025.
“Esto nos pone ante un escenario en que las panaderías de barrio se verán afectadas y terminarán subiendo sus precios, frente a los cuales no es descabellado pensar en un pan de 800 pesos la unidad básica”, dijo la vocera de Adepan.
¿Qué dice el Gobierno Nacional?
La polémica por este tema llegó a tal punto que el mismo ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, tuvo que salir a aclarar lo que estaba sucediendo con este impuesto, frente al cual dijo en primer lugar que es una “mentira” y en segundo, que ya se le hicieron varios cambios junto a los ponentes del proyecto.
“Otra exageración de la oposición que no tiene nada que ver con la realidad, las panaderías están exentas de impuestos, de hecho ayer acordamos con los ponentes un aumento de ventas anuales de hasta 10 mil UVT, de ahí para abajo no se paga ningún impuesto. En el caso del pan industrial, tiene impuestos y como dice la ley, tiene azúcares añadidos, grasas añadidos o sodio añadidos, que no creo que en el pan artesanal se dé”, explicó Ocampo.
Al revisar el texto final de la reforma tributaria presentada al Congreso de la República se advierte que “no serán responsables de este impuesto, los productores personas naturales que en el año gravable anterior o en el año en curso hubieran obtenido ingresos brutos provenientes de las actividades gravadas con este impuesto, inferiores a 3.500 UVT. (…).” que es consistente con los umbrales máximos para clasificar como responsable de IVA”.
Así mismo agregan que “Precisado lo anterior, se consideró que era pertinente aumentar este umbral a 10.000 UVT a fin de lograr el propósito perseguido (...) Frente a estas modificaciones los ponentes y coordinadores no realizamos comentarios adicionales y, en consecuencia, aceptamos el artículo con los cambios propuestos, incluido el aumento del umbral de 3.500 a 10.000 UVT”.
Un último intento por quitar el impuesto al pan
En diálogo con SEMANA; el senador de la Alianza Verde, Jairo Castellanos, aseguró que pese a las modificaciones que se anunciaron frente al impuesto al pan, lo más recomendable es que esta iniciativa se elimine de una vez por todas, con el fin de evitar confusiones que golpeen la canasta familiar de los más humildes.
“Estamos hablando de esas familias que desayunan con pan, huevo y aguapanela, esas que han tenido que vivir los estragos más duros de la inflación. No podemos permitir que se grave con impuestos de ningún tipo ese producto que es tan vital para el consumo de las familias más pobres. Este es un alimento que se debe proteger, no se debe enviar mensajes equivocados”, dijo el legislador.
Pese a que ya se hizo un intento para eliminar este artículo durante la concertación con los ponentes, el cual fue infructuoso, el senador Castellanos anunció que volverá a intentarlos durante las votaciones plenarias, por lo que pidió el apoyo de la comunidad para que ejerzan presión social sobre quienes quiere ponerle impuestos a este alimento básico.