Este martes el presidente Gustavo Petro anunció nuevas modificaciones a la sobretasa de renta que se incluyó en la reforma tributaria para las compañías que producen petróleo en el país. Variará entre 5 %, 10 % y 15 % con base en el precio internacional de los últimos 20 años.
Sin embargo, esta nueva propuesta dejó aún más preocupadas a las compañías del sector que operan en Colombia. Para la Asociación Colombiana del Petróleo y Gas (ACP) esta iniciativa implicaría que en los próximos años la sobretasa que se causa se encuentre entre 10 y 15 puntos.
“Esta propuesta si bien considera la variación de los precios internacionales, es la más gravosa de todas las propuestas”, aseguró. Desde que se radicó el proyecto de ley, esta sobretasa ha tenido varias modificaciones, pues inicialmente se planteó como un impuesto a las exportaciones.
El gremio manifiesta que es 115 % más costosa para las empresas que la propuesta inicialmente radicada por el Gobierno nacional en impuestos para hidrocarburos, y 5 % más gravosa que lo aprobado en primer debate el pasado 6 de octubre.
Pero esa no es la única mala noticia. El presidente Gustavo Petro también reiteró que se mantendrá la propuesta de prohibir la deducción de las regalías del impuesto a la renta. El sobrecosto de esta prohibición tiene un efecto exponencial porque debe calcularse a una renta del 50 % para los próximos dos años y posteriormente a una tarifa de 45 %.
La ACP calcula que el recaudo esperado para el 2023 por estas dos medidas (sobretasa de renta y prohibición de deducibilidad de regalías) será de $ 9,6 billones, cuando lo que se esperaba recoger con la propuesta aprobada en el primer debate eran $ 9,1 billones.
Las consecuencias en el sector petrolero
La ACP alertó que con la nueva propuesta se pueden comprometer el desarrollo de los descubiertos recientes de gas natural y petróleo y las actividades de exploración, además de poner en riesgo inversiones para aumentar el factor de recobro, que sostienen la actual producción de petróleo.
Adicionalmente, con información de algunas empresas, el recorte en los programas de inversión podría oscilar entre 30 % y 50 %, la producción caería gradualmente y podrían perderse al año 2026 entre 130.000 y 200.000 barriles día de producción de petróleo.
El gremio también calcula que para finales de esta década la caída en producción sería superior a 450.000 barriles, es decir, caería 47 % frente a la producción actual que está en 749.022 barriles diarios. Con una disminución en la producción, “a partir de 2026 el recaudo con reforma tributaria será inferior al recaudo sin reforma, es decir, el país y las regiones perderán ingresos como consecuencia de la reforma tributaria”.
Específicamente para el año 2026, el recaudo con la reforma tributaria será hasta 10 % menor que el recaudo sin reforma. Y a finales de esta década, el recaudo sería 44 % inferior frente a lo esperado. “Con esta propuesta las regiones pierden ingresos por regalías en los próximos años y se reducirían en 34 % las posibilidades de solucionar sus necesidades básicas insatisfechas”, dijo la ACP.
Por ello, el gremio petrolero le propone al Gobierno nacional y al Congreso de la República que la sobretasa de renta sea de cinco puntos si el precio del barril de petróleo Brent supera los US$ 71 para los años 2023, 2024 y 2025, similar a la de los sectores financiero y eléctrico. Además de mantener la deducibilidad de las regalías del impuesto a la renta.