En todo el mes de diciembre, el Gobierno nacional se ve inmerso en las discusiones sobre el salario mínimo, pues este debe realizar una concertación con las centrales obreras del país y los diferentes gremios para el incremento de la siguiente vigencia.
Es importante tener en cuenta que este aumento debe responder a las cifras de inflación y las cifras de productividad, pues en caso de que sea mayor, la economía se podría ver afectada y los productos y servicios podrían tener un impulso peligroso en sus precios.
La negociación se realiza en el marco de la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Salariales y Laborales, en la que participan representantes del Gobierno, de los gremios empresariales y de los sindicatos.
Es importante tener en cuenta que aunque se discute en 2024, el salario mínimo definido regirá a partir de enero de 2025. Esto permite a las empresas y al Gobierno planificar con anticipación sus presupuestos y estrategias económicas.
¿Cuánto aumentará el salario mínimo para 2025 si se aprueba la propuesta de la CUT?
La Central Unitaria de Trabajadores (CUT) fue uno de los primeros sindicatos en exponer su propuesta inicial. Sin embargo, aunque han dejado ver cuál podría ser su idea del incremento, aún no se conoce con exactitud la cifra exacta.
La CUT dijo que el incremento del salario debería ser de mínimo un 10 % o dos dígitos. Por ello, si el Gobierno sigue la idea de esta asociación, debería subir el sueldo al menos $ 130.000, lo que ocasionaría que este quede fijado en $ 1.430.000, sumándole además el subsidio de transporte.
Pese a ello, este incremento no sería el adecuado para varios expertos, teniendo en cuenta que la inflación cerraría en la mitad, 5 %, y que las proyecciones de inflación para el siguiente año se centran en un 3 %.
Es importante tener en cuenta que las negociaciones estarán altamente influenciadas este año por la situación económica actual del país, como lo es la inflación acumulada, el crecimiento económico y los desafíos sociales. Este proceso es crucial porque busca equilibrar los intereses de trabajadores y empleadores, garantizando estabilidad y equidad.
De hecho, el gerente del Banco de la República, Leonardo Villar, aseguró que es clave que el aumento sea de los salarios reales y nominales. Además, que no se puede pretender que el incremento del salario sea de la misma magnitud nominal del año pasado, pues la inflación prevista para el siguiente año es del 3 %.