El Gobierno nacional, a través del ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, anunció este 7 de junio que el alza en los precios del diésel será inminente este año, tras la crisis de caja que afronta el Gobierno por estos días y que motivó el congelamiento del presupuesto para varias carteras.
“Por lo pronto va a salir un decreto de grandes consumidores de diésel, en los cuales no hay ningún producto sensible en la economía colombiana y vamos a volver a examinar el tema de cómo hacemos un ajuste en el precio del diésel, que lo queremos hacer concertado”, comentó Bonilla en Blu Radio.
Este decreto golpearía exactamente a las empresas que consumen cerca de 20.000 galones de diésel, que entrarán a tener un precio actualizado. Es decir, subirá para estos actores. Respecto al alza, el ministro precisó que esta dependerá del estado de los precios internacionales.
El director de la cartera de Hacienda aseguró que dentro del cobro están exceptuados los transportes masivos y también las regiones que no están interconectadas y que consumen bastante diésel. Por otro lado, el subsidio del diésel se mantiene en las petroleras, las empresas de carbón, que son grandes entidades que desarrollan su propia logística.
Respecto al tiempo que tomará el incremento, el ministro Bonilla aseguró que, al igual que el alza de la gasolina, este aumento será progresivo y no se dará de un momento a otro.
Es clave recordar que durante esta semana el Gobierno nacional, a través del Ministerio de Hacienda, decidió congelar una parte del presupuesto público, es decir, del dinero que se gira a las diferentes carteras, como una medida para enfrentar la crisis de recaudo de impuestos que se vive en el país.
El alza del diésel sería la segunda medida con la que el Gobierno espera compensar esta caída y así lograr una mayor liquidez en la caja. Tras la decisión, los diferentes gremios camioneros se han pronunciado y han rechazado la medida, que podría afectar el bolsillo de quienes trabajan en este sector y también de los colombianos, que verían un aumento en la inflación o en el costo de ciertos productos que se transportan en el país en vehículos impulsados por diésel.
Luego del anuncio, SEMANA consultó con la Federación de Empresarios del Transporte de Carga respecto a la decisión. El presidente de la federación, Henry Cárdenas, aseguró en un pronunciamiento que están en total desacuerdo con el alza del diésel: “Grandes problemas se vienen para Colombia con esta alza. Señor ministro de Hacienda, reunámonos para llegar a un acuerdo nacional para el tema de combustible, pero los subsidios tienen que seguir”.
Otra voz que se pronunció en el gremio fue la de Arnulfo Cuervo, vicepresidente de Fedetranscarga, quien aseguró que las declaraciones del ministro no acuden a la realidad, pues el aumento del diésel sí incrementará las cifras de inflación en Colombia y no afectará a unos pocos colombianos, sino a un gran número de nacionales.
“Continuamos nosotros, desde Unidos, desde Fedetranscarga, solicitándole al Gobierno que estudie la fórmula para que el precio del diésel no esté amarrado al precio internacional, sino que corresponda a unos valores de precios de producción y, por supuesto, a la intermediación o la ganancia que debe tener Ecopetrol. En Colombia somos productores y refinadores, por lo que somos autosuficientes en temas de diésel”, declaró Cuervo.
Además, puntualizó que es importante que el Gobierno considere el subsidio del FEPC (Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles) como un subsidio social, porque el precio del diésel impacta directamente en la economía de todos los hogares del país y también es esencial en el desarrollo económico que pretende el Gobierno nacional.