Este miércoles se conoció, a través de una notificación ante la Superintendencia Financiera, que la junta directiva del Grupo Bolívar aprobó en sesión extraordinaria y por unanimidad iniciar el proceso de enajenación de la inversión en Sura Asset Management.

Según el documento, hay tres disposiciones para el acuerdo. La primera señala que, durante abril de 2023, se evaluarán las alternativas de salida previstas en el contrato. En segundo lugar, se tramitarán las notificaciones que correspondan en los términos contractuales. Y, finalmente, se instruyó a la administración comunicar el día de hoy acerca de esta decisión a Grupo de Inversiones Suramericana y a Sura Asset Management.

La suma a pagar sería cercana a 1,2 billones de pesos. Si se paga en acciones preferenciales del Grupo Sura, esto diluiría a los accionistas preferenciales en alrededor de un 50 %, afectando mayoritariamente a los ahorradores en los fondos de pensiones.

Lo grave del asunto es que, durante más de 10 años, el Grupo Sura no reveló de forma adecuada las obligaciones derivadas de estos “acuerdos complejos” con el Grupo Bolívar. Y todavía hay más con otras contrapartes.

Por ese motivo, Jaime Gilinski, máximo accionista de Grupo Sura, con el 38 % de participación, había pedido el año pasado convocar una asamblea extraordinaria con el fin de que la administración y el revisor fiscal dieran todas sus explicaciones sobre los hallazgos en los estados financieros de dicho conglomerado financiero.

*Gabriel Gilinski es accionista de Publicaciones SEMANA.