Los dolores de cabeza en materia de costo de vida para los colombianos continúan, ya que durante este principio de año ha sido a causa de los precios de arriendos, alimentos y costos adicionales, sin tener en cuenta uno de los elementos clave en las vivencias del día a día, las tarifas de servicios.

Aunque la inflación ya habría llegado a su techo, y algunas presiones económicas han empezado a ceder durante este segundo trimestre del año, aún se pueden presentar algunas coyunturas que pueden generar afectaciones para el bolsillo de los colombianos.

En materia de energía, las preocupaciones continúan siendo parte del día a día para el sector, especialmente a causa del Fenómeno de El Niño, que parece estar cada vez más cercano en cuanto a su llegada a Colombia, y que puede generar fuertes sequías en el territorio nacional, por lo que puede ocasionar problemas en cuanto a la generación de este servicio para los hogares de los colombianos.

Mantener las jornadas de siembra de árboles y no arrojar elementos que puedan producir incendios forestales, hacen parte de las estrategias para combatir el fenómeno de El Niño. | Foto: Cortesía Gobernación Valle del Cauca

Ya de por sí, las difíciles coyunturas económicas presentes en el contexto nacional han generado un aumento de precio para la energía, con valores cercanos a los 533,7 pesos por kWh, con un aumento del 42,61 % frente al mes de enero, lo que sería según reportes de la empresa XM, los precios más altos desde el año 2016.

Por lo que el costo de energía no solo está aumentando para los consumidores, sino también para las empresas encargadas del manejo y suministro de este recurso clave, aunque las organizaciones señalan que a corto plazo las afectaciones económicas no afectarán los costos de las tarifas para los consumidores. Sin embargo, más complicaciones podrían avecinarse.

Las tarifas de servicio preocupan a los colombianos. | Foto: Getty Images

Esto puede generar que algunos prestadores de este servicio, tengan que aumentar el valor de los recibos de luz, especialmente en el caso de las empresas que compran parte de esta energía a través de la bolsa, a pesar de que la proporción es de un 80/20 en la mayoría de empresas en el país.

Entre las localidades más afectadas en el territorio colombiano por esta coyuntura, resaltan Nariño, Arauca, Cali, Caquetá, Huila y Putumayo, siendo esta última una de las más afectadas, como lo reveló la ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, debido a que la Empresa de Energía del Putumayo tendría que comprar un 80 % de su energía por la bolsa.

Las empresas que ejercen una mayor compra de energía dentro en la Bolsa forman parte de un 35 % de la demanda total de energía en el ámbito nacional, por lo que implicaría que los usuarios de compañías entre las cuales resaltan Electrohuila, Electrocaquetá, Dispac y Enel Colombia, entre otras, obtendrán mayores afectaciones en sus tarifas y en el costo de este servicio para sus hogares.

Irene Vélez, ministra de Minas y Energía. | Foto: Twitter @IreneVelezT - A.P.I.

De esta manera, desde la cúpula gubernamental, aseguran que esta situación es una de las motivantes por la cual durante inicio de año se propuso ejercer un control tarifario para la energía, a causa de las afectaciones que tienen estas coyunturas para el bolsillo de los colombianos.

Sin embargo, esta propuesta no ha avanzado por buen camino, sino que, por lo contrario, generó fuertes críticas por parte de las organizaciones encargadas del control energético del país.

Aún está por verse de manera concreta las afectaciones que sufrirá esta industria a corto plazo, pero el panorama sigue preocupando a los implicados más cercanos a este suministro, y a los impactos que puede tener no solo para el bolsillo de los colombianos, sino también para el bienestar de este servicio y su llegada al hogar de todos los ciudadanos.