La Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) lanzó un SOS al Gobierno nacional, a las autoridades regionales y al gremio de los taxistas, para que se no se cierre la puerta al diálogo y se eviten las vías de hecho que constituyan una afectación a la ciudadanía en general durante el paro de taxistas previsto para este miércoles 22 de febrero.

Este llamado se da tras conocerse la decisión tomada por los representantes de la denominada “mancha amarilla” que anunciaron que para mañana se llevará a cabo una jornada de paro nacional al no llegar a un acuerdo con el ministro de Transporte, Guillermo Reyes, respecto al pliego de solicitudes presentado por este gremio del transporte y que están enfocadas en la regulación de las aplicaciones de movilidad y otras demandas.

Para los comerciantes, una vía de hecho como la anunciada por los taxistas tendrá un impacto significativo sobre la economía, que se traduce en pérdidas incalculables y que difícilmente son recuperables en el tiempo.

“Tan importante es el derecho a la protesta, como el respeto al trabajo y a la libre movilidad. Es lamentable que se haya vuelto costumbre ver a miles de personas intentando llegar a sus sitios de destino, caminando a la intemperie grandes distancias”, expresó Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco.

Según consultas realizada por Fenalco a sus afiliados, las protestas con bloqueos en vías que se prevé realicen los taxistas, impactará negativamente en las ventas del comercio. Se estima que estas pueden disminuirse en un 25 %. Foto (archivo) Guillermo Torres Reina / SEMANA. | Foto: Revista Semana

El gremio, que representa al comercio formal del país, manifestó con base en reportes entregados por diferentes afiliados en todo el país, que un bloqueo en las principales vías arterias causaría una disminución en las ventas del orden del 25 % en los establecimientos de comercio y en restaurantes, especialmente. “Esta situación es insostenible. A este ritmo la economía perderá aún más impulso, precisamente cuando más necesitamos estimular la producción y el empleo”, afirmó Cabal.

Así las cosas, esta manifestación que iniciarán los taxistas ahondará más en el difícil comienzo de año que ha tenido el comercio colombiano, que viene arrastrando una serie de complicaciones que se han traducido en menores ventas, caída en el empleo y mayores costos por la entrada en vigencia de la actual Reforma Tributaria.

Los comerciantes vienen arrastrando desde finales de 2022 un balance poco alentador respecto a las ventas, en parte por la no realización de la tercera jornada del Día Sin IVA. Indican que en el arranque de año, las cifras no son buenas y que se prevé que sea un 2023 de pérdidas para el comercio. | Foto: Getty Images

El escenario no es el más alentador para esta actividad económica, donde no solo el panorama que registra la economía por cuenta de la alta inflación, tasas de interés y volatilidad del dólar tienen afectados los negocios vinculados a este sector.

La percepción de los comerciantes respecto al futuro cercano deja en evidencia que el año 2023 será también complejo. Esto se desprende de los datos arrojados en la más reciente Bitácora de Fenalco, correspondiente al pasado mes de enero y donde el 72 % de los comerciantes dijo que sus ventas fueron iguales o inferiores a las registradas en enero de 2022. Y solo un 28 % reportó un aumento por este concepto.

Los taxistas definieron la hora "cero" para el inicio de un paro nacional y que arrancará a las 5:30 de la mañana de este miércoles 22 de febrero. Foto (archivo) Guillermo Torres Reina / SEMANA. | Foto: GUILLERMO TORRES

“Fenalco confirma su posición, en cuanto a la necesidad de generar reglas claras e igualdad de condiciones para los sistemas de transporte individual y especial. Sin embargo reitera que es con el Gobierno y en el Congreso donde se dirimen las diferencias y no usando las calles como vía de presión”, puntualizó el gremio.

En cuanto a la protesta de los taxistas, se estipuló que la jornada comience a partir de las 5:30 de la mañana de este 22 de febrero, por lo que se prevé traumatismos en la movilidad, principalmente en Bogotá.

Al respecto, desde el Gobierno nacional, el Ministerio de Transporte afirmó que se respetará el derecho a la protesta, pero que no se permitirá ningún bloqueo de vías y que se tomarán las medidas a que haya lugar para garantizar la libre circulación de los ciudadanos.

“Las puertas del Ministerio de Transporte siguen abiertas para canales de diálogo y concertación con todos los actores del sector Transporte. A Colombia le llegó la hora de acabar con las exclusiones”, recalcó la cartera dirigida por el ministro Reyes.