Una de las obras de infraestructura más anheladas por el país en las últimas décadas acaba de ser inaugurada este viernes 4 de septiembre. Se trata del túnel de La Línea, que, según el presidente Iván Duque, se convierte en una megaobra que simboliza la capacidad del país para salir adelante en estos momentos difíciles.

La ministra de Transporte, Ángela María Orozco, fue protagonista de primera línea en la puesta en marcha de esta obra monumental. Se trata de una obra planteada hace 118 años para mejorar la infraestructura y que en adelante será clave para la competitividad del país. Después de superar muchos escollos, fue contratada en 2009 pero solo se vino a concretar 11 años después y tras invertir más de 1 billón de pesos.

La ministra de Transporte, Ángela María Orozco, fue protagonista de primera línea en la puesta en marcha de esta obra monumental. Recuerda que desde que llegó a su cargo, en 2018, el presidente Duque le asignó la tarea de ‘concluir, concluir y concluir’ buena parte de las obras de infraestructura que estaban en marcha y que son vitales para la competitividad y productividad del país.

Permitirá comunicar a los municipios de Cajamarca, en Tolima y Calarcá, en Quindío, y operará en su totalidad en 2021 Esta obra, considerada la más representativa de la ingeniería colombiana, tiene 8,6 kilómetros de longitud y es parte de las obras estratégicas diseñadas para atravesar la cordillera Central. Permitirá comunicar a los municipios de Cajamarca, en Tolima y Calarcá, en Quindío. Cuando esté operando en su totalidad, en abril de 2021, esta obra de infraestructura incluirá una doble calzada de 30 kilómetros, con 31 viaductos, 25 túneles y 3 intercambiadores viales para atravesar la cordillera Central. 

En una entrevista con SemanaTV, la ministra Orozco habló de la magnitud de la obra y de las lecciones aprendidas en este proceso. Tras la puesta en marcha de esta megaobra, cree que hacia adelante es importante contar con una planeación rigurosa, la mejor selección de los contratistas encargados de ejecutar las obras y la minuciosa verificación de los temas ambientales que puedan terminar afectando la buena marcha de este tipo de obras de infraestructura.