Siempre lo mismo, siempre estamos pensando en los mismos. Nuestros referentes se vuelven cortos por que todo se extrapola al pedacito de mundo que vemos día a día.

Justamente lo que más nos hace falta es mirar hacia otras direcciones. Entender y ver cosas diferentes, mconocer gente diferente, darnos cuenta que nuestro alrededor no es el mundo entero. Hace unos años alguien a quien admiro mucho (líder caleño de empresa colombiana enorme) me dijo que había que pensar siempre en elegir gente para cargos de liderazgo que le quepa el mundo en la cabeza. Esto implica precisamente conocer cosas distintas y gente distinta.

Cuando pensamos en referentes de liderazgo caemos en los lugares comunes de los que siempre están por ahí en redes y normalmente van asociados a lo que consideramos éxito, cosas como plata , poder, belleza, bienes materiales y prestigio. Pero hay otro tipo de líderes que desconocemos y que si buscamos un poco más nos sorprendemos.

Particularmente encuentro apasionantes los coach deportivos. Y como me mueve el futbol desde el corazón podría irme por la fácil, Pep Guardiola, Jurgen Klopp, Marcelo Gallardo, Ernesto Valverde, Xavi Hernandez, Lionel Scaloni o incluso Jorge Luis Pinto o Alberto Gamero para criollizar un poco más la reflexión. La cosa es que no me voy a ir con el fútbol me voy con el baloncesto.

Encontré un personaje apasionante del que ya he leído y observado varias cosas. Se trata de Michael Krzyzewski o mejor conocido como coach k, muy famoso por su trabajo como entrenador en jefe del equipo de baloncesto masculino de la Universidad de Duke, un puesto que ocupó desde 1980 hasta su retiro después de la temporada 2021-2022.

Coach K obtuvo cinco títulos de la NCAA, en los años 1991, 1992, 2001, 2010 y 2015. Esto lo convierte en uno de los entrenadores más exitosos en la historia del baloncesto universitario de Estados Unidos.

Adicionalmente ganó múltiples premios y reconocimientos como el de Entrenador Nacional del Año en varias ocasiones. Sumado a su éxito en Duke, Coach K también fue el entrenador del equipo nacional de baloncesto masculino de Estados Unidos. Bajo su coaching el país obtuvo tres medallas de oro olímpicas consecutivas en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, Londres 2012 y Río de Janeiro 2016, y una medalla de oro en el Campeonato Mundial FIBA 2010.

Este personaje nacido en 1947 ha sido capaz de mantenerse vigente y entrenar diferentes generaciones de manera exitosa. ¿cuál ha sido su secreto? Además de múltiples habilidades y conocimiento técnico, coach K habla de conocer su equipo, escucharlos y entenderlos. Afirma que ha leído mucho sobre sicología y que también es importante ser humilde.

Habla con claridad del manejo de las emociones, pero lo interesante es que nos las restringe, sino que plantea que las emociones son las que permiten tener la pasión para alcanzar los objetivos grupales. Plantea entonces cuatro puntos básicos para tener en cuenta en el control de las emociones y el resultado de equipo , la actitud (qué actitud decido tener frente a un problema)las creencias (convicción), la preparación y la ejecución.

Las preguntas que plantea Coach K son ¿cuál es tu actitud? ¿creen el uno en el otro? ¿cómo te preparas? ¿cómo puedes hacerlo diferente en adelante?

Escuchar a coach K es muy inspirador. Un profesional super enfocado en logros, pero también que genera un sentido de cohesión de equipo envidiable.

Creo firmemente que los entrenadores deportivos son unos líderes que están a otro nivel. Manejar los egos, las frustraciones, las individualidades y generar un equipo que quiera ganar por un solo propósito es algo verdaderamente difícil cuando se asume que todos son de alto desempeño como individuos.

Seguiré buscando gente fuera de mi burbuja normal. Para encontrar agentes reales de cambio que han generado impacto y cambio en las formas de liderar. Por ahora les cuento de Coach K, crack del baloncesto y crack ser humano en su aproximación al liderazgo.