Los programas de redistribución del ingreso tienen un mayor efecto sobre la reducción de la pobreza, que el crecimiento de la economía. Así lo destacan Wilman Gómez y Alejandro Torres, investigadores de la Universidad de Antioquia, en un estudio que acaban de publicar. Afirman que por cada punto de crecimiento económico adicional, la pobreza cae más de medio punto. Sin embargo, por cada punto de mejora en la distribución del ingreso, la pobreza cae más de dos puntos. El resultado sobre el efecto de la distribución parece demasiado grande para lo que muestran otros estudios internacionales, pero el estudio tiene la virtud de recordar la necesidad de trabajar en conjunto el crecimiento y las políticas de distribución. Naturalmente, y aunque el estudio no profundiza en el tema, con recursos limitados, se requiere que la acción del Estado en redistribución esté bien enfocada. Que efectivamente los oriente a la población más pobre y en las actividades que tengan la mayor rentabilidad social, para conseguir la meta de reducir la pobreza de niveles del 50% actual al 39,2% en 2010.