El pasado 17 de agosto, la Escuela de Administración de la Universidad del Rosario entregó la décima segunda versión del Premio Empresario del Año, con el respaldo y apoyo de la Revista Dinero.Además de las categorías Mariposa de Lorenz –para el empresario más reconocido de este año–, Ave Fénix –al resurgimiento empresarial– y Halcón Dorado –que se instauró el año anterior y destaca la trayectoria de los egresados de la facultad de este centro universitario–, se incluyó para esta versión el premio Colibrí Esmeralda, que reconoce emprendimientos colombianos innovadores y éticos que buscan resolver problemas relevantes en la agenda de sostenibilidad global, alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.Recomendado: Estos son los ganadores del XII Premio Empresario Colombiano 2017Para este año los ganadores fueron Germán Forero, fundador y presidente de Gerfor, en la categoría Mariposa de Lorenz; Manuel José Zambrano, gerente de Icobandas recibió la distinción Ave Fénix; Camila Bonilla, gerente de la Unidad de Negocio Hemato-Oncología de Laboratorios Abbvie Colombia, y Andrés Felipe Silva, gerente de Try My Ride, emprendimiento que ganó el premio Colibrí Esmeralda.
Foto: Dentro de los planes de expansión de Gerfor está el montaje de una nueva tabla de grifería metálica cerca a Bogotá y ampliar la planta de Guatemala.Lea también: Los planes de expansión de PVC Gerfor“Este es un mensaje de admiración al sector empresarial, ejemplo de reputación, innovación, sostenibilidad, internacionalización y productividad. Es el reconocimiento de líderes empresariales que generan empleo, construyen riqueza, superan dificultades y sueñan con algo mejor”, señaló José Manuel Restrepo, rector de la Universidad del Rosario.Recomendado: Estos son los finalistas del XII Premio Empresario Colombiano 2017Mariposa de LorenzEl ganador de la versión de este año del premio Mariposa de Lorenz fue Germán Forero Rodríguez, fundador y presidente de Gerfor, una multinacional de capital 100% colombiano, con más de 50 años de experiencia en la producción y comercialización de tuberías y accesorios de PVC, grifería, tejas y geosistemas. Las otras tres empresas finalistas fueron Vecol, Siderúrgica de Occidente y Círculo de Viajes Universal.Lea también: Así le va a Círculo de Viajes UniversalGerfor, fundada en 1957, y que hoy tiene más de 1.200 empleados, cuenta con plantas de producción, además de Colombia, en Perú y Guatemala, y centros de distribución en El Salvador y Honduras.Su evolución en el negocio le permitió pasar de la comercialización de grifos y válvulas, en su origen, al desarrollo y producción de PVC, desde lo que denomina tubosistemas, hasta la línea de cubiertas plásticas y la tubería aligerada. Posteriormente, implementó la línea de productos de geosistemas.Una de las fortalezas de la compañía –que el año pasado facturó más de $210.000 millones, según la Superintendencia de Sociedades– es la realización de jornadas de capacitación, desde laboratorios o desde aulas móviles que articula con el Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena).Donó al Sena 5 laboratorios en ciudades como Bogotá, Cali, Barranquilla, Cúcuta y Dos Quebradas y, además, en 2016 Gerfor lanzó 4 aulas móviles que sirven para capacitar maestros de obra, empleados de ferreterías y personal del ramo de la construcción, certificando cursos en un convenio, también con el Sena, en ciudades como Bogotá, Villavicencio, Cali, Medellín, Barranquilla, Pereira, Armenia, Manizales, Popayán, Pasto, Sincelejo y Montería y tiene proyectado llegar al menos a otras 8 ciudades. Así, desde 2002 Gerfor y el Sena han capacitado alrededor de 20.000 personas en instalaciones de redes de suministro, redes de desagüe para construcción e infraestructura e instalación de aparatos sanitarios.En sus planes de expansión está el montaje de una nueva planta a las afueras de Bogotá para producir grifería metálica en línea y exportar a los mercados de Centroamérica, Chile, Bolivia, Perú y Ecuador. Además, en la misma zona ha dispuesto de 14 hectáreas para construir 70 bodegas, que estarán listas en los próximos 3 años. En el exterior trabaja en la ampliación de la producción en la planta de Guatemala –que atiende mercados de Centroamérica– para pasar de 1.200 toneladas a cerca de 2.000.El Ave FénixConsolidar una historia empresarial supone caídas, aprendizajes y superar adversidades. El premio Ave Fénix reconoce el renacer de una empresa que vivió dificultades y situaciones de crisis. Para este año, la ganadora fue Icobandas, una empresa de Popayán, creada en 1973, que atiende las necesidades de bandas transportadoras y de transmisión para el mercado nacional y países vecinos.
Foto: Icobandas atiende las necesidades de bandas transportadoras y de transmisión para el sector real. Tiene 50% de participación del mercado en el país y cuenta con más de 100 empleos.La compañía padeció los problemas surgidos por el desplome de la economía a finales del siglo pasado. La actividad de Icobandas estaba estrechamente relacionada al crecimiento de la economía y a la dinámica empresarial. La crisis del sector real contrajo el mercado y afectó a los clientes de la empresa, golpeando la producción, retrasando los pagos e, incluso, imposibilitando la recuperación de la cartera, porque muchas empresas desaparecieron. Estas dificultades generaron problemas que afectaron su capital de trabajo, liquidez y la rotación de inventario.Icobandas fue de las primeras compañías en acogerse a la Ley 550 de reestructuración empresarial. Refinanció sus obligaciones con los acreedores, cumplió sus compromisos en los plazos establecidos y desarrolló un plan estratégico para enfrentar un mercado deprimido y una competencia cada vez más agresiva.Gracias no solo a la estrategia, sino también al compromiso de más de un centenar de empleados con los que contaba, atendió la reestructuración y amplió su portafolio de productos y desarrolló nuevas referencias con mayor valor agregado y diferenciación que permitieron mayores márgenes de rentabilidad.Hoy, Icobandas tiene una participación superior a 50% del mercado nacional de bandas transportadoras de refuerzo textil y genera 150 empleos.Colibrí esmeraldaTry My Ride es un emprendimiento que nació hace cinco años y busca desarrollar ecosistemas de movilidad sostenible para centros educativos y empresas, a partir del uso de tecnología, aplicaciones y big data. Este emprendimiento hace la movilidad amigable y sostenible, conecta personas por medio de su app (web y móvil) y sus servicios de transporte –bicicleta, carro– para empleados y estudiantes.
Foto: Try My Ride tienen al Citibank como su principal cliente y con él espera abrir nuevos mercados en Costa Rica, Perú, Chile y ArgentinaDe acuerdo con la empresa, los tiempos por trayecto de las personas que usan sus servicios se reducen en 10% y los costos por movilidad pueden caer hasta en 100%. “Creamos un modelo multimodal (varios medios de transporte) que dan cobertura y solución en transporte a 100% de los empleados y estudiantes de nuestras comunidades”, explica Andrés Felipe Silva, gerente de la compañía.Busca transformar ciudades por medio de una movilidad sostenible y colaborativa, impactando la calidad de vida de las personas. Según la firma, es un modelo escalable y replicable, porque las problemáticas de movilidad en las grandes ciudades son idénticas, no solo en el país sino en el exterior.Su estrategia de expansión va de la mano con sus clientes y apalancados en la presencia internacional que ellos tienen. Try My Ride llega a otros destinos y allí empieza a abrir mercados. Hoy, su principal cliente es el Citibank y este año va a implementar el programa para esta entidad en Caracas, San José de Costa Rica y Lima y para 2018 el objetivo es llegar a Buenos Aires y Santiago de Chile.En medio de un panorama complejo en lo económico, denso en lo electoral y atento a los desarrollos de la implementación de los acuerdos de paz, el sector productivo sigue su desarrollo y, a pesar de las dificultades, tiene historias para contar y reconocer.