No es exagerado decir que el cargo de rector de la Universidad Nacional de Colombia (UN) es casi de la responsabilidad de un alcalde. Esta institución, junto con la Universidad de Antioquia, se ha convertido en el referente más importante de la educación superior pública en Colombia. Con cerca de 50.000 estudiantes, 8.500 de ellos cursando posgrados, la UN es la piedra angular de la producción científica del país. La institución aporta el 28 por ciento de la investigación que se hace en Colombia. El cambio de administración, después seis años en los que estuvo Ignacio Mantilla Prada, se da en medio de un horizonte complejo. La UN hoy se está enfrentando a un panorama de desfinanciamiento que la ha llevado a afrontar problemáticas como el deterioro de la infraestructura, la cobertura académica y la extensión de la investigación, además del arduo trabajo para garantizar una descentralización que genere igualdad en todas las sedes del país.Puede leer: Quién debe ocupar la rectoría de la Universidad Nacional de Colombia 2018 2021Para muchos la UN ha sido presa de las mismas políticas educativas que se han creado supuestamente para darle un empujón a las universidades, entre ellas, la Ley 30 de 1992, con la que se rige la educación superior pública del país. Con esta legislación se creó un tope de financiamiento que hoy tiene en jaque a las instituciones, que, según expertos, deben liderar la vocería para lograr reestructurar sus condiciones.En ese escenario de la ley se definió un crecimiento del presupuesto ligado al IPC (Índice de Precios de Consumo), aun cuando en el resto del mundo el costo de la educación superior crece por encima de este referente. Esa diferencia se ha venido acumulando a lo largo de los años y fue así que apareció la crisis.Es por eso que esta elección será decisiva para el futuro de la UN. El rector será elegido por el Consejo Superior Universitario, que se compone de la ministra de Educación Nacional, dos miembros designados por el presidente de la república, un exrector de la Universidad Nacional de Colombia, un miembro designado por el Consejo Nacional de Educación Superior (CESU), un miembro del Consejo Académico; un profesor de la Universidad, un estudiante y el actual rector, que ejerce como vicepresidente del Consejo, con voz pero sin voto.Le sugerimos: Universidad Nacional patrimonio de todosEl proceso se inició el 22 de enero con nueve candidatos aceptados, los cuales se sometieron a una consulta electrónica donde docentes, estudiantes y egresados votaron por quienes consideraron adecuados para asumir el cargo. El resultado culminó con los cinco candidatos que obtuvieron el mayor respaldo: Jorge Cárdenas, con 18,4 por ciento; Edna Bonilla, con 10 por ciento; Jorge Bula, con 20 por ciento; Dolly Montoya, con 9,6 por ciento; John William Branch, con 16,4 por ciento; y un porcentaje considerable votó en blanco con un 14 por ciento.Estos serán los únicos que podrá considerar el Consejo Superior para la toma de una de las mayores decisiones de la institución: la designación de la persona que llevará por tres años las riendas de la universidad y según el estatuto general, podrá reelegirse una única vez, limitando a seis años su gestión. El peso de los votos no fue ponderado de la misma manera: la opinión de los profesores tuvo un valor del 60 por ciento, los estudiantes el 30 por ciento y los egresados un porcentaje del 10 por ciento.Pero la pregunta es, ¿qué está en juego en esta designación de rector?La universidad cuenta hoy con 9 sedes en todo el país y su presupuesto está por el orden de 600.000 millones de pesos en aportes de la nación. De ese monto, hay una destinación de un 25 por ciento para investigación; la institución cuenta con una Estampilla Nacional y una calificación de riesgo financiero triple A.Le recomendamos: Universidad Nacional la mejor en investigación de ColombiaIgnacio Mantilla Prada, actual rector, aseguró que están en juego varios proyectos como la consolidación de la nueva sede en la Paz, en el departamento del Cesar, “hay que tener mucho cuidado con las decisiones, lo que está bien es mejor no cambiarlo, por lo tanto en este momento lo que la universidad necesita es fortalecer las sedes, continuar con el proyecto de hospital universitario, sosteniendo lo que se ha hecho desde hace años”.Por otro lado, para Julián de Zubiría, director del Instituto Alberto Merani y consultor en educación de las Naciones Unidas, la Universidad Nacional no ha liderado la lucha por el derecho a la educación como le corresponde, “ha permanecido en silencio ante el cambio en la política pública educativa. Muchos extrañamos su voz más crítica e independiente, como debería corresponder a una universidad de su nivel académico”. A pesar de esto, resalta su liderazgo en investigación.Pero para Andrés Felipe Salazar, representante de los estudiantes en el Consejo Superior de la Universidad, el ambiente general desde la comunidad estudiantil es de preocupación y crisis.Según menciona, estas elecciones están lejos de lo que históricamente se ha hablado: la institución autónoma, plural, abierta, profundamente vinculada a los problemas de la sociedad y moldeada por la política educativa actual. Puede leer: Polémica por aumento en la financiación de las universidades Nacional y Distrital“A pesar de que la universidad se mantiene a la vanguardia en temas de su capacidad académica, investigativa y demás, existe un movimiento de inercia que la sigue llevando hacia adelante, pero la fricción misma de la crisis tiende a plantear que se detenga”, apunta.Muchos son los que piden con urgencia lograr un modelo de financiamiento sostenible y conseguir recursos adicionales para mejorar la calidad, pues la institución no puede dejar de ser, como explica Moisés Wasserman, exrector de la Universidad Nacional, un actor central en la resolución de problemas que aporta a la investigación y los análisis profundos. Para esto, hace un llamado a los candidatos a poner como meta primordial la investigación como la columna vertebral de la formación de sus estudiantes.Julián de Zubiría reconoce que cualquiera que llegue a la rectoría debe mantener y robustecer la autonomía e independencia como voz reflexiva, crítica y propositiva frente a los problemas nacionales, además, “se hace necesario realizar un trabajo más amplio que neutralice desde la academia algunos grupos internos de presión que han adquirido excesivo poder, lo cual tiende a debilitar una participación más diversa de docentes y directivos”, dice.De igual manera, los estudiantes reclaman una apertura al debate democrático, que se inicie un mejor diálogo entre directivos y alumnos por medio de mecanismos de vocería, también es fundamental para ellos recuperar figuras como los consejos estudiantiles, para que se incentive la participación y organización de los jóvenes. El representante de los estudiantes asegura que dentro de este proceso de designación de rector existen situaciones que son desafortunadas, hace énfasis en el porcentaje especial que tiene el voto docente en la consulta, “ellos estaban muy interesados en buscar puntos para sus hojas de vida y salarios, esto se prestó para que existieran transacciones burocráticas, hay candidaturas que se mezclaron en esto ofreciendo cargos”.Según Mantilla, un candidato no puede ofrecer de ninguna manera cargos o salarios pues la designación está sumamente regulada, “la votación de los profesores en una comunidad universitaria debe tener un peso mayor que la de los estudiantes, de igual forma la decisión será tomada por el Consejo y los candidatos se presentan sabiendo esas reglas”.Le recomendamos: Cómo será la Universidad Nacionalen el 2025A pesar de esto, durante el día de la consulta electrónica, siete candidatos denunciaron la práctica de acciones irregulares. Según ellos el profesor Jorge Bula tuvo instaladas mesas con publicidad a favor del él, actos que según un acuerdo no debían suceder. Quien se viera involucrado en este tipo de prácticas debía desistir de su candidatura. Bula, por su parte, aseguró que la iniciativa fue de un estudiante y no por su orden.Dentro de las discusiones que se han creado en torno a esta designación de rector, otro de los temas que genera polémica en algunos sectores, es el parentesco de hermanos entre Jorge Hernán Cárdenas y el actual ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas. Jorge Hernán, egresado de la Universidad de los Andes, ya se había postulado para la rectoría en 2015 y fue vicerrector de la institución en 1991. Además, trabajó como consejero para la modernización del Estado, hizo parte de la comisión de alto nivel para investigar a la Policía Nacional, luego del sonado caso de la comunidad del anillo y ha sido contratista en los gobiernos de Álvaro Uribe y Juan Manuel Santos.Esto ha entrado en la discusión de su candidatura, entre posturas divididas, muchos declaran que Cárdenas no representa a la institución y cuestionan su compromiso institucional, entre sus argumentos explican que nunca estudió ni dio clases en la UN. Sin embargo, Cárdenas no tiene ningún impedimento para llegar al cargo de rector.Le sugerimos: Se inició la carrera por la rectoría de dos universidades públicas en ColombiaJorge Iván Bula
Foto: Universidad Nacional de ColombiaMagíster en desarrollo económico de la Universidad de Manchester y doctor en sociología de la Universidad Católica de Lovaina, en Bélgica. Dentro de sus metas está fortalecer la inversión de egresados y empresarios para conseguir recursos por medio de donaciones y alianzas estratégicas con un ente jurídico independiente que canalice los recursos. Además pretende trabajar en una ley estatutaria que garantice el financiamiento de las universidades públicas colombianas. Edna Bonilla Sebá
Foto: Universidad Nacional de ColombiaContadora pública de la UN, especialista en gerencia de impuestos y doctora en estudios políticos. Cuenta con experiencia en administración pública y en investigación y extensión en proyectos nacionales e internacionales sobre educación. Bonilla propone una universidad proactiva en la búsqueda de recursos adicionales para la educación superior como una exploración para el desarrollo de proyectos estratégicos.Jorge Hernán Cárdenas
Foto: Universidad Nacional de ColombiaEs magíster en administración del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y en economía de la U. de Minnesota. Trabajará para resolver estructuralmente el problema de financiamiento con una ley propia, también pretende crear una infraestructura que permita realizar las funciones misionales de la institución y fortalecer el trabajo en las sedes de todo el país.John Willian Branch
Foto: Universidad Nacional de ColombiaProfesor titular, PhD en ingeniería, MSc en ingeniería de sistemas e ingeniero de minas y metalurgia de la Universidad Nacional de Colombia, director del grupo de investigación GIDIA categoría A1 e investigador Senior, clasificación Colciencias 2017 y actual vicerrector de la sede de Medellín. Plantea liderar y transformar el ajuste de una ley de educación nacional que garantice los recursos necesarios para atender los retos a los que se enfrenta la universidad, y trabajar profundamente en lograr una descentralización donde se evidencian mejores condiciones en todas las sedes del país. Dolly Montoya Castaño
Foto: Universidad Nacional de ColombiaQuímica farmacéutica UN, magíster en ciencias biomédicas de la UNAM con PhD en ciencias naturales, technische Universität München (Alemania). Para ella la UN debe retomar él liderazgos en distintos escenarios nacionales para gestionar una reforma a la Ley 30, buscando la ampliación de una base presupuestal de las universidades públicas en un 50 por ciento. De igual forma lograr construir un ambiente lejos de la pugnacidad, lleno de comunicación mutua entre estudiantes, profesores, administrativos, directivos, egresados y pensionados.