En los primeros meses de gobierno, el presidente Iván Duque ha tenido que enfrentar las consecuencias de varias décadas de desfinanciación de las universidades públicas. El movimiento estudiantil ha sacado a la gente dos veces a las calles, con el fin de exigir que se aumente el presupuesto para la educación superior, y el magisterio anunció un paro para este martes. Las diferencias entre los pliegos de petición y lo que ha ofrecido Duque son abismales. Mientras los estudiantes hablan de 18 billones de pesos a dos años, el gobierno apenas se comprometió a conseguir un billón y medio más. Luego de las manifestaciones, Duque dio a conocer una inversión de 500.000 millones de pesos para el próximo año y un adicional de un billón de pesos que saldrían del sistema de regalías. La semana pasada el Congreso aprobó el presupuesto nacional en el cual el sector de educación fue el que se llevó el rubro más alto: 41,4 billones de pesos. El plan que tiene el presidente apunta a dar un viro a esta situación y garantizar el funcionamiento de las instituciones públicas de educación superior, y así disminuir las brechas de acceso, la desfinanciación, el problema de infraestructura, y la transformación del plan bandera del gobierno de Juan Manuel Santos: Ser Pilo Paga. En contexto: La transformación que Duque propone para Ser Pilo Paga El plan de Duque fue nombrado Generación E. La iniciativa sería la hoja de ruta para los próximos cuatro años en los que espera cumplir las exigencias de la ciudadanía, que en las calles ha pedido un auxilio para salvar a las universidades públicas. El programa Generación E tiene tres componentes según el gobierno: avance en la gratuidad (equidad), reconocimiento a los mejores bachilleres (excelencia) y fortalecimiento de las instituciones de educación superior públicas (equipo). En cada uno de estos puntos se invertirán los 500.000 millones de pesos para las universidades públicas. Según el Ministerio de Educación se espera que 80.000 estudiantes se beneficien de este programa en el próximo año y un total de 320.000 en los cuatro años de mandato de Iván Duque. ¿Y Ser Pilo Paga? Una de las principales preguntas es qué va a pasar con Ser Pilo Paga, el programa de Santos que premiaba a los mejores bachilleres de bajos recursos para que tuvieran la oportunidad de ir a la universidad que eligieran. Este programa fue criticado porque la mayoría elegía estudiar en universidades privadas y cuantiosos recursos del Estado terminaron financiando estas instituciones. Las universidades públicas resienten que ese dinero podría haber ayudado a subsanar el hueco financiero de la educación superior en el país. En Generación E, la idea del gobierno es reformar Ser Pilo Paga y convertirlo en el programa de Excelencia. Este es uno de los tres componentes que tendrá generación E. Con los cambios se espera que los estudiantes se sientan más estimulados a escoger universidades públicas. Para lograrlo, se estableció que si los jóvenes elijen una universidad pública se les va a pagar la totalidad de la matrícula y su manutención. Puede leer: 10 lecciones que deja la multitudinaria marcha por las universidades públicas Mientras que si se deciden por una universidad privada, el Estado pagaría cerca del 50 por ciento, mientras que un 25 por ciento le corresponderá a la institución y el 25 por ciento restante se buscara con donaciones del sector privado. La ministra María Victoria Angulo explicó que se acordará con los centros educativos lo que el Estado le girará a cada uno por estudiante. Para acceder a estas becas, será requisito tener una puntuación menor a 57 en el Sisbén y obtener un puntaje mayor o igual a 359 en las pruebas Saber 11, que es el examen de Estado que mide la calidad de la educación. En cuanto a las universidades que pueden recibir estudiantes del programa, deben ser públicas o privadas con acreditación en alta calidad o una institución no acreditada que cuente con el 25 por ciento de sus programas acreditados en alta calidad. Justo en este fin de semana se dieron a conocer los resultados del último examen Saber 11 y los estudiantes que cumplan las condiciones para aplicar podrán ver los detalles del proceso para iniciar sus estudios superiores en 2019 con este apoyo estatal. En el caso del componente de excelencia, en 2019 se otorgarán 4.000 cupos para que los ciudadanos puedan aplicar. Duque fue el único que apoyó la continuidad del programa Ser Pilo Paga durante la campaña electoral y esta fue su promesa: "Todos los jóvenes en Colombia tienen que ser pilos, y todos deben tener la oportunidad de financiar su educación, el programa se puede mantener, pero lo que necesitamos es ampliar la gratuidad universitaria para los estratos 1 y 2 con la ampliación de trescientos mil cupos por año, ese compromiso lo asumo”, dijo en un debate. La otra gran pregunta de los colombianos es qué va a pasar con quienes ya eran beneficiarios del programa Ser Pilo Paga. El gobierno se comprometió a mantener las mismas condiciones a estos estudiantes hasta que terminen sus estudios. Para asegurar esto se van a destinar 2,5 billones de pesos, según ha dicho Duque y la ministra. La jefa de esa cartera dijo que a medida que los becarios completen sus estudios se destinarán esos dineros a la universidad pública. En contexto:La carta de un grupo de académicos sobre Ser Pilo Paga Tras el anuncio realizado por el presidente durante el fin de semana, las reacciones en contra no se han hecho esperar. Uno de los entes más críticos frente al programa de Duque es el Sistema Universitario Estatal (SUE), del cuál los 32 rectores de las universidades públicas hacen parte. Ellos, a diferencia de los estudiantes, tienen un posición más moderada en cuanto a las exigencias que les hacen al gobierno. Sin embargo, luego de una reunión en el Consejo Nacional de Rectores (actividad que se llevará a cabo hasta el 23 de octubre), rechazaron el punto "Excelencia". Si bien el Gobierno Nacional le sumó los componentes para incentivar a los estudiantes a estudiar en las universidades públicas, el SUE continúa cuestionando la forma en la que los dineros públicos pueden terminar, de nuevo, en las carteras de las universidades privadas. Jairo Miguel Torres, presidente de la organización, expresó que "los recursos destinados no deben destinarse a otros fines por parte del Ministerio de Educación Nacional pues de esta manera se agudiza la crisis de financiamiento. Desfortunadamente no se atiende el clamor de las universidades y en tal sentido es urgente estructurar una mesa de diálogo intersectorial que posibilite tratar los problemas expuestos a corto, mediano y largo plazo". Además se anunció que Fecode tendrá una jornada de cese de actividades este martes 23 de octubre.