SEMANA EDUCACIÓN (S.E.): Colombia está en un momento de transición al cambio de gobierno, además, se suma la etapa de posacuerdo de paz, ¿cuáles deberían ser los principales temas en los que debería enfocarse el país en materia de educación?Le puede interesar: “El entorno es determinante para asegurar el aprendizaje”MARCELO CABROL (M.C.): Normalmente diría que Colombia tiene un problema de aprendizaje a todo nivel y esto está medido por pruebas nacionales e internacionales. Con esa frase estoy describiendo a muchos países de América Latina, pero, en un contexto de paz, las cosas son distintas, porque paz y aprendizaje deben confluir. En ese sentido, el país tiene un desafío doble. No se puede pensar en aprendizaje solo a través de pruebas estandarizadas con resultados más o menos inmediatos. El nuevo gobierno tiene que concebirlo en el marco del proceso; en una educación más bien a largo plazo. En estas nuevas formas de enseñar y aprender, los avances digitales deben ser una herramienta que se articule al proceso de paz en el país. Los cálculos muestran que el mejor retorno económico se da en la inversión que se hace en los primeros años, pero también es necesario tener en cuenta que existen otros beneficios como el bienestar personal y social, variables más difíciles de cuantificar pero muy importantes.S.E.: Algunos expertos en educación del país han hablado de la necesidad de tener un currículo único para disminuir la inequidad en calidad educativa. ¿Qué piensa de esta posibilidad?M.C: Es importante tener una base común, un marco de referencia básico que sea claro. Lo dice la Ocde, el BID, el Banco Mundial, todos los que trabajamos estos temas. El docente debe trabajar sobre un marco de referencia único, pero con una gran capacidad de resolución respecto a lo que se hace en la escuela, el aula o la comunidad. No dije la palabra autonomía docente nunca porque no me gusta. Viene de la idea de que los profesores son autónomos y lo demás es subsidiario, por eso es importante trabajar integrando esos niveles.S.E.: Usted habla mucho de los entornos laborales del futuro y la necesidad de educar en habilidades humanas, ¿cuáles son puntualmente y cómo la educación del presente puede comenzar a trabajarlas?M.C.: Se trata de 16 habilidades del siglo XXI. Algunas son básicas. Pero, más que cuáles son, lo importante es a qué responden. Las dividimos en tres categorías. Primero, las básicas: cómo los estudiantes pueden aplicar competencias a tareas cotidianas. Las segundas tienen que ver con la complejidad: poder abordar desafíos complejos, por ejemplo, ser creativo o comunicar efectivamente. Y las terceras tienen que ver con adaptarse al cambio constante. Todos estos componentes necesitan ética y empatía.Le recomendamos: La visión sobre el aprendizaje de Rodolfo Llinás
Ella será una de las expertas invitadas a la Cumbre Líderes por la Educación 2018, el evento más esperado del sector. Se llevará a cabo en Bogotá el próximo 19 y 20 de septiembre, en el centro de convenciones Ágora.El artículo hace parte de la edición 36 de la revista Semana Educación. Si quiere informarse sobre lo que pasa en educación en el país y en el exterior, suscríbase ya llamando a los teléfonos (1) 607 3010 en Bogotá o en la línea gratuita 018000-911100.Para estar enterado sobre las noticias de educación en Colombia y el mundo, síganos en Facebook y en Twitter.Encuentre más información sobre la cumbre aquí.