El anuncio de la ministra de Educación sobre el fin de Ser Pilo Paga abrió una enorme controversia con bandos a favor y en contra. En el grupo de estudiantes que han sido beneficiarios de este programa, además, generó una enorme tristeza. Se trataba del cierre de un esfuerzo sin antecedentes en la política educativa del país y que le costaba al gobierno un billón de pesos al año. Esa cifra, que apenas alcanzaba a resolver la situación del 2 por ciento de los egresados de bachillerato, le cambió la vida a 40 jóvenes que de otra manera no habrían podido llegar a las universidades más prestigiosas del país. En muchos de esos centros académicos también se sintió esa desazón. “Estoy preocupado. Lo que dijo la ministra fue muy general y lo único que dio a entender por el momento es que el énfasis sería fortalecer la universidad pública. No sé qué significa eso. Si se acaba Ser Pilo Paga creo que es algo muy triste”, dijo Francisco Piedrahita, rector de la universidad Icesi de Cali.Le sugerimos: Ser Pilo Paga, un programa estrella que se apagaSEMANA EDUCACIÓN habló con un grupo de estudiantes beneficiarios del programa. Esto es lo que piensan: Liliana González Méndez, oriunda de Mitú, VaupésEstudiante de Ingeniería Civil- Universidad Javeriana“Tengo 20 años y me gradué del colegio José Eustasio Rivera en mi pueblo. De los 70 que se graduaron conmigo, tres accedimos al programa en 2015, somos de la primera cohorte. Ingresar a Ser Pilo Paga me pareció muy genial. Es una oportunidad que no se le presenta a uno todos los días, y más en una población tan alejada como la mía, donde las limitaciones son tantas. No existe acceso por vía terrestre, solo por vía aérea y es bastante costoso. La oportunidad me cambió la vida. Para cuando me enteré de que tenía acceso al crédito condonable busqué las universidades que tenían cupos abiertos en ese momento. Ya voy en octavo semestre. Voy al día, voy bien. Me parece que la oportunidad que me dieron a mí fue muy buena, pero me pareció triste que no la tuvieran todos. En mi caso, que solo tres personas de todo el municipio (que cuenta con tres colegios) accedieron a la universidad, me parece injusto. La mayoría de mis compañeras formaron familia. Y los otros que se graduaron conmigo, solo sé de otros dos que estudiaron. Es decir, 10.000 pilos pòr año es muy buena cifra, pero igual es limitada en comparación como la cantidad de egresados de la educación media. Pienso que si se invirtiera mejor la plata, más personas podrían estudiar”.Escuche el pódcast con la directora de Semana.com, Cristina Castro y el jefe de redacción del portal, Luis Carlos Gómez, sobre las razones que llevaron al gobierno a cerrar el programa y las criticas que esto genera. Escucha"Ser Pilo Paga, un programa estrella que se apaga" en Spreaker.Jonathan Méndez, oriundo de BucaramangaComunicación social y Periodismo-Universidad Autónoma de BucaramangaActualmente cursa su práctica profesional“Soy de la primera generación, la que inició a estudiar en el primer semestre de 2015. Considero que es injusto que los 5 millones que costaba en ese entonces mi semestre no se hubieran usado para darle educación a 12 o 15 personas en una universidad pública. Si bien es una estrategia que financia la educación a 10.000 estudiantes por año, si ese recurso se hubiera destinado a la universidad pública hubieran sido 80.000 los beneficiados por año. Además hay deficiencia en el control del recurso: conozco gente con dinero que figura con un sisbén bajo y gracias a eso estudió gratis con Ser Pilo Paga y obtuvo varios subsidios”.Le recomendamos: La deuda de Ser Pilo Paga ya va en dos billonesEdwin Stiben Urbano Castaño, oriundo de Pasto, NariñoEstudiante de Ingeniería Industrial- Universidad Nacional de Colombia“Es un tema que debe abordarse por diferentes enfoques, debemos reconocer que como programa ha logrado grandes cosas para la educación del país, además de beneficiar a los jóvenes de necesidades reales. Sin embargo como estudiante de universidad pública debo reconocer que este no va en pro de incentivar el fortalecimiento de la educación oficial en el país. Sin embargo, este programa representa para mí una de las mejores oportunidades de la vida, debo reconocer que gracias al programa hoy me encuentro estudiando en la mejor universidad del país”. Paulina Morales, oriunda de BogotáEstudiante de Fonoaudiología de la Universidad Nacional de Colombia“Soy de la primera cohorte del programa y fue acertado para mí acceder a él. Es la mejor decisión que he tomado en mi vida, estoy muy de acuerdo con el programa. Entiendo que Ser Pilo Paga necesita sus reformas, pero no se me hace necesario que se termine. Debería reformarse para que siga favoreciendo a los 10.000 jóvenes por año con los más altos puntajes en el Icfes y que no pueden acceder a la formación terciaria de calidad”. Le puede interesar: El fin de Ser Pilo Paga: las razones por las que no puede continuar el programaLeidy Castro Montenegro, oriunda de BogotáEstudiante de Administración de Empresas- Universidad EAN“Si no hubiera existido Ser Pilo Paga yo no hubiera estudiado en una universidad porque no tenía el dinero. Sin esto, probablemente hubiera estudiado en el Sena. La verdad al principio estaba preocupada porque no sabía si era verdad. Tenía miedo de acceder al programa pero terminé por hacerlo. Y fue una experiencia chévere. Nunca sufrí discriminación por parte de mis compañeros, nunca me incumplieron con los pagos, nos dieron el salario mínimo mensual para el subsidio de sostenimiento, el trámite para elegir materias y pagar siempre fue muy fácil. Al final, es una oportunidad muy grande porque es muy difícil poder estudiar y creo que hay mucha gente que se lo merece. No me parece que lo quiten, era un proyecto iniciado, ¿no? Creo que la falla del gobierno que lo implementó fue que dirigió muchos recursos a la universidad privada”.Le puede interesar: Los números de Ser Pilo PagaAngie AguirreFederación Estudiantil Universitarios“Estamos en contra del programa porque es uno que, a pesar de que se planteó con el objetivo de que más colombianos puedan acceder a la educación superior, en realidad no se está logrando de la manera más efectiva. La gran cantidad de recursos que se están utilizando para este programa se podrían invertir en universidades públicas y se podrían tener más estudiantes accediendo a la educación superior. Actualmente, el programa está dirigiendo la mayoría de los recursos a universidades privadas, lo cual no es tan positivo, teniendo en cuenta que esos recursos son públicos y deberían ir a las universidades públicas. No se está beneficiando a la educación terciaria estatal. Si queremos que la educación sea un derecho y sea universal, son necesarios programas que lo permitan, pero que se debe pensar la forma en que se están haciendo. La idea no puede ser, tampoco, plantear un programa, que luego no funcione y que se deje de hacer. Hay que pensarlo muy bien”.Esto piensan nuestros lectores del fin de Ser Pilo Paga¿Cree que es positivo que el programa @serpilo_paga se acabe?#SerPiloPaga #ConLupa— Semana Educación (@SemanaEd) 6 de septiembre de 2018