El expresidente de Fecode, Nelson Alarcón, ha pedido en varias oportunidades aplazar el regreso a clases presenciales, ya que se debe salvaguardar la población, los estudiantes, sus familias y los profesores.
Hace unos días el Alarcón explicó que el avance actual de la pandemia no permite que se inicie el regreso gradual a las aulas.
Alarcón manifestó que entre el 15 % y el 20 % de los profesores en Colombia hacen parte de la población de riesgo, pues tienen más de 60 años o tienen alguna comorbilidad.
“La exigencia de Naciones Unidas para retornar a las escuelas, no puede estar por encima del Derecho Constitucional a la vida y la salud. Debemos seguir preparando la escuela del retorno. NO A LA ALTERNANCIA Y MENOS CUANDO HOY ESTAMOS EN EL PICO MÁS ALTO”, dijo hace unos días Alarcón a través de su cuenta de Twitter.
No obstante, este lunes se inició un nuevo año escolar en el país para estudiantes de colegios calendario A y universidades y la secretaria de Educación de Bogotá, Edna Bonilla, aclaró: “Teniendo en cuenta la situación de salud pública en Bogotá, las actividades se iniciarán a través de la modalidad no presencial”.
Sin embargo, en territorios como Atlántico, Caldas, Girón, Rionegro, Sabaneta y Cartagena se llevará a cabo el modelo de alternancia, según anunció hace pocos días la ministra de Educación, María Victoria Angulo.
De acuerdo con la ministra en su momento, en otras regiones del país “están dadas” las condiciones para un retorno gradual a las aulas, aunque ese proceso será de manera gradual, progresiva y segura.
“La fecha exacta en la que entrarán cada una de las entidades territoriales va a estar muy ligada a la evolución de la pandemia. Son varias las regiones del país que pueden empezar, como lo tienen previsto, finales de enero o primera semana de febrero”, explicó la ministra.
Desde que comenzó la pandemia, Fecode en repetidas ocasiones ha estado en contra del regreso a las aulas. Sin embargo, frente a un eventual retorno a clases presenciales, Fecode reiteró en su más reciente editorial los siguientes criterios:
1. Debe tener en cuenta los conceptos de la comunidad científica y de salud. Desconocerlos, por las razones que sean, a la hora de tomar definiciones sobre salud pública y el regreso a la Escuela, puede tener un desenlace fatal.
2. La bioseguridad debe garantizarse en forma previa y con recursos suficientes. Es responsabilidad de los gobiernos nacional, departamentales y distritales y no se debe delegar a las familias ni a colegios. Este punto incluye también, asegurar las condiciones de salud mental y física de la comunidad educativa y declarar enfermedad profesional a la covid-19 y a las enfermedades relacionadas.
3. Respaldar con adecuado presupuesto del Estado la organización escolar y curricular que requieren las actividades no presenciales, como también, las presenciales, una vez no haya amenaza a la salud y la vida.
Sin embargo, los planes del Gobierno son que los estudiantes regresen a las aulas en marzo de este año, luego de más de un año de estar por fuera de estas.
Por su parte, según la más reciente encuesta de Fenalco, persiste la incertidumbre entre los padres de familia respecto a la seguridad de las clases presenciales, ya que, de 554 padres de familias, un 24 % de los encuestados no tiene claro si las escuelas, colegios, universidades y demás centros educativos están listos para regresar a clases en los establecimientos físicos, así sea en forma parcial.
Además, el 22 % considera que los planteles donde estudian sus hijos para volver a clases presenciales no están preparados, el 27 % cree que están poco preparados y el otro 27 % asegura que están muy preparados.