Los millennials son esa generación de nacidos entre los años 1980 y 1995 que, por sus comportamientos y gustos alejados de los convencionalismos que caracterizaban a sus padres, son todavía un grupo poblacional indescifrable para el sector económico. Tienen una percepción diferente de lo que la empresa con la que se vinculan debería hacer por ellos: que les permita crecer, les motive y que amplifique sus capacidades. Si no lo logran, cambian de trabajo sin que eso suponga una complicación para ellos.Le puede interesar: ‘LAs 10 carreras con más oferta laboral‘Estas demandas tan inéditas han provocado que las marcas empiecen a asociarse con las instituciones de educación superior en beneficio mutuo: las segundas forman a los estudiantes de acuerdo a las necesidades de las primeras, y estas, en contraprestación, acuden a las segundas para reclutar a sus futuros trabajadores a los que les potencian sus características millennials. En definitiva: ambos ganan.Esta articulación ha demostrado dar buenos resultados. Por lo menos en el Instituto de Alta Calidad Glion y en Les Roches, donde el 98 % de sus estudiantes se vinculan al mercado laboral en cuanto se gradúan y en puestos de alta gerencia y similares. “Solo el 2 % no lo logra porque no quiere: o se van de año sabático a viajar o siguen preparándose”, explica Beatriz Blecher Catto, responsable de estrategia de las universidades. “Yo les hago llorar, que entiendan que llegar a esos puestos cuesta”, añade Franc Ávila, profesor de innovación, desarrollo, emprendimiento, estrategia y tecnología de Les Roches. Relacionado: ¿Por qué los millennial no duran en sus trabajos?‘Firmas internacionales como Dior, Rolex, Bloomberg, NBC Universal o la cadena hotelera Intercontinental hacen fila para reclutar a los alumnos que salen de las instalaciones de estas dos instituiones de educación superior cada año. “Se necesita gente capacitada, con idiomas, apasionada y capacitada. Yo me he llevado muchos jóvenes a trabajar a mis hoteles. Tenemos 67 nacionalidades trabajando sólo en el de Londres”, explica Alvaro Rey, quien fue alumno de maestría de gestión hotelera y administración de empresas en Le Roche en 1980. En la actualidad este colombiano ocupa el cargo de gerente del InterContinental Park Lane de Londres, el más importante de esta cadena británica.Los altos costos de las matrículas son la consecuencia de este grado de calidad en la educación que exigen las dos unviersidades. Y el inconveniente más evidente para muchos potenciales estudiantes. El precio de los programas (con una duración de los tres meses hasta los tres años) oscila entre los 25 mil euros (algo más de 75 millones de pesos) y los 180 mil francos suizos (513 millones de pesos) e incluye la estadía, la manutención, los materiales y gastos extra. Existen diferentes programas de financiación, la mayoría con bancos, que permiten que el alumno empiece a pagar a partir de los 10 años de haberse graduado. Cuentan los directivos de Les Roches y Glion que se trata de una inversión a futuro. Eso sí, una inversión a futuro que, a pesar del alto grado de enganche y empleabilidad, no todos pueden asumir.Relacionado: ¿Cuá es la mejor universidad de Derecho en Colombia?‘La metodología de enseñanza de estas dos instituciones en simple: educación centrada en la elaboración y ejecución de proyectos, la resolución de conflictos, prácticas profesionales en empresas relevantes y la formación en competencias socioemocionales como el trabajo en equipo, la toma de decisiones, el procesamiento de información, el buen servicio y la diligencia. De hecho, el 33 % de los egresados desarrollan sus propios negocios mientras son estudiantes. Algunos de estos han llegado a alcanzar un valor en el mercado de un millón de dólares. Es decir, son completamente rentables.Los programas que ofrecen están todos enfocados al área de la Administración de Empresas con énfasis en la industria del servicio de alta calidad y la hospitalidad, un término extraído del anglicismo hospitality, “que nada tiene que ver con hospitales”, advierten los responsables de las dos instituciones, cansados de que les pregunten por esa definición. La oferta incluye pregrados y posgrados. Tanto Glion como Les Roches están acreditadas en alta calidad por el New England Association of Schools and Colleges, NEASC, la asociación de acreditación más importante de Estados Unidos y de la que forman parte universidades como Yale o Harvard. Cuentan con sedes en países como Suiza, España, Jordania y Singapur, lo que permite la movilidad de sus estudiantes y que estos perfeccionen diferentes idiomas. Las prácticas profesionales son obligatorias. “Los perfiles de nuestros son de muy alto nivel, son particulares. Deben superar varios procesos de selección para comprobar si cuentan con la personalidad correcta”, señala Fabienne Rollandin, directora ejecutiva de Relaciones Externas de Glion.Para estar enterado sobre las noticias de educación en Colombia y el mundo, síganos en Facebook y en Twitter.